La 'low cost' irlandesa afronta un sobrecoste por combustible de 342 millones, pero mantiene su compromiso de no subir las tarifas
DUBLIN, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair registró un beneficio neto de 302 millones de euros en su ejercicio 2005/06 --con cierre a 31 de marzo--, lo que representa un incremento del 12% en relación al año fiscal anterior, a pesar del fuerte incremento de los costes por combustible derivado del persistente encarecimiento del petróleo.
La 'low cost' irlandesa afrontó una factura anual de carburante de 462 millones de euros, un 74% superior a la del ejercicio precedente y con un sobrecoste de 342 millones. De hecho, el gasto por combustible disparó un 5% los costes unitarios de la compañía, mientras que caen un 6% si no son contabilizados los costes de queroseno.
A pesar del impacto en las cuentas del alza del crudo, el director general de Ryanair, Michael O'Leary, confirmó el compromiso de la aerolínea de no repercutirlo al cliente a través de recargos por combustible. "La clave de los incrementos del tráfico y del beneficio registrado por Ryanair es su rechazo a aplicar suplementos por carburante a sus pasajeros, mientras que la mayoría de aerolíneas europeas ya los han introducido. En algunos casos, los recargos de otras aerolíneas superan la tarifa media de Ryanair", indicó.
Ryanair elevó su facturación un 28% durante el pasado año fiscal, situando su cifra de negocio anual en los 1.693 millones de euros, gracias fundamentalmente al fuerte incremento del 26% del volumen de pasajeros transportados, hasta alcanzar los 35 millones de usuarios. La compañía consiguió elevar su ingreso medio por pasajero ('yield') un 1% a pesar de haber aumentado su oferta de vuelos en un 27% durante el ejercicio.
O'Leary prefirió mostrarse "prudente" de cara a la evolución del negocio durante el presente ejercicio, y auguró un beneficio neto para el año fiscal 2006/07 que previsiblemente se situará en la parte baja de una horquilla de crecimiento de entre el 5% y el 10% (entre 317 millones y 332 millones de euros) si el barril de petróleo se mantiene en el entorno de los 70 dólares. La 'low cost' prevé incrementar en un 20% la cifra de pasajeros transportados, hasta alcanzar los 42 millones.
