BERLIN, 12 May. (EUROPA PRESS) -
El grupo industrial alemán Thyssenkrupp obtuvo un beneficio de 696 millones en el primer semestre de su año fiscal, un 50% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior, a pesar de haber recuperado 142 millones tras retirarse en la puja por la compra de la canadiense Dofasco, anunció hoy la compañía.
Pese a este descenso en el resultado neto, el beneficio antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (Ebitda) mejoró un 10%, hasta 2.176 millones. Las ventas alcanzaron los 22.728 millones, un 10% más, mientras que los ingresos por pedidos superaron los 24.330 millones, lo que supone un incremento del 9%.
En el segundo trimestre del año, el beneficio se situó en 441 millones, un 58% menos, mientras que la facturación alcanzó los 11.786 millones, un 11% más. El Ebitda aumentó un 32%, hasta 1.278 millones.
Por segmentos, los servicios registraron un volumen de negocio de 3.383 millones, lo que supone un incremento del 10%, mientras que la división de acero facturó 2.711 millones, un 17% menos, y la de automoción 2.165 millones, un 10,5% más.
Para el conjunto del año, el grupo espera que el negocio del acero continúe marcado por el alto precio de las materias primas y de la energía. Pese a esto, el mercado de acero inoxidable se recuperará, al igual que la demanda en Europa Occidental, Norteamérica y Asia.
