ESTRASBURGO (FRANCIA), 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Parlamento Europeo dio hoy su visto bueno al procedimiento de urgencia para que la Comisión Europea pueda ayudar a los Estados miembros a paliar las pérdidas que la gripe aviar está causando en el sector avícola por el descenso del consumo de pollo y la consiguiente reducción de los precios. El PE aprobó el mecanismo de urgencia sin debate previo.
La comisaria de Agricultura y Desarrollo Rural, Marianne Fischer Boel, presentó la semana pasada formalmente en la reunión del colegio de comisarios su propuesta para modificar el actual Reglamento sobre medidas de apoyo al sector, con el objetivo de ampliar su ámbito de aplicación y permitir una cofinanciación de hasta el 50% de las actividades destinadas a suavizar o prevenir las pérdidas, entre ellas el sacrificio de aves.
También prevé medidas de "compensación" por las restricciones impuestas al movimiento de animales cuando se detecta un foco de gripe en el territorio comunitario. Ello permitirá, según el Ejecutivo comunitario, adoptar "medidas excepcionales de apoyo al mercado" a petición de los Estados miembros, debido a las "graves alteraciones" del mercado provocado por la pérdida de confianza de los consumidores por los riesgos para la salud pública o animal.
La propia Fischer-Boel había adelantado, en el consejo de Ministros de Agricultura del pasado lunes 20 de marzo y posteriormente en la comisión correspondiente del Parlamento Europeo (PE), esta iniciativa que se aprobó mediante procedimiento acelerado en el colegio de comisarios. Ahora, una vez recibida la luz verde de la Eurocámara, deberán aprobarla definitivamente los Veinticinco en el Consejo de Agricultura previsto para el 25 de abril en Luxemburgo.
Según la Comisión no se trata de medidas "específicas" sino de modificar una base legal ya existente para que los Estados miembros puedan presentar propuestas solicitando financiación comunitaria. Tampoco hay un presupuesto concreto y las ayudas dependerán de las peticiones que hagan los países.
El sector del pollo tiene asignados 100 millones de euros anuales en el marco de la Política Agrícola Común (PAC), cantidad que ya se ha gastado este año en ayudas a la exportación, por lo que la futura financiación europea se hará con cargo a otro capítulo de la PAC.
La responsable de Agricultura del Ejecutivo comunitario ha dicho públicamente que "lo más razonable", si se está padeciendo una caída del consumo, es dejar de producir. Fischer-Boel cree que "no es posible responder a esta situación sin precedentes usando los actuales medios existentes" y por eso defendió extender el campo de aplicación de las reglas actuales para permitir la cofinanciación comunitaria de medidas excepcionales de apoyo al mercado.
"Cada Estado miembro podrá así decidir las medidas que mejor se adapten a sus situación particular", indica la comisaria, que considera la "fórmula más racional" indemnizar a los productores que adopten medidas tendentes a bajar temporalmente la producción.
