PARIS, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El grupo automovilístico PSA Peugeot-Citroën confirmó hoy que reducirá el próximo año su plantilla en Francia en 3.550 efectivos, en todas las plantas y en todas las direcciones de la empresa, mediante bajas incentivadas y prejubilaciones, sin recurrir a despidos.
La multinacional que presiden Christian Streiff destacó que esta iniciativa responde a "medidas de urgencia" para reaccionar ante la crisis que está golpeando de forma "brutal" a la industria automovilística.
El propósito de PSA Peugeot-Citroën es adelantar bajas y jubilaciones que debían producirse en el futuro, salvo en el caso de la planta de Rennes que, afectada por una caída del 30% en las ventas de coches de gamas media y alta, perderá 900 trabajadores que podrán recolocarse en otras instalaciones del grupo.
Las medidas de la compañía, que en España dispone de dos plantas ubicadas en Vigo y Madrid, se aplicará durante un período de seis meses que dará comienzo el próximo 1 de enero. En el caso de la fábrica de Rennes, el plan se aplicará durante todo el próximo ejercicio.
Las bajas vienen acompañadas de una serie de medidas como incentivos, ayudas para la recolocación o la creación de empresas. Según el director de Recursos Humanos del grupo, Jean-Luc Vergne, la empresa ha decidido reducir su plantilla sin recurrir a despidos, apelando a medidas voluntarias y eludiendo medidas traumáticas.
