MÁLAGA, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un total de 532 trabajadores de tierra de la compañía aérea Iberia se encuentran en huelga en el Aeropuerto de Málaga ante la falta de acuerdos entre los sindicatos y la empresa.
El presidente del comité de empresa de CCOO de Málaga en Iberia, Braulio Ramírez, señaló en declaraciones a Europa Press que durante la semana se llegó a un acuerdo a través del Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla) por el que se proclamaron las vacaciones de la plantilla fija de actividad continuada a tiempo parcial con programación anual de descanso.
"Por este motivo, decidimos aplazar el comienzo de la huelga y esperar alguna otra iniciativa de la empresa, pero ayer acudimos al Sercla y no hubo ninguna propuesta, por lo que nos vemos obligados a iniciar las huelgas", indicó Ramírez, que detalló que hay dos convocatorias, una desde las 05.00 horas a las 11.00 horas, y otra desde las 15.00 horas a las 18.00 horas.
El comité de empresa de la compañía Iberia t 4, también presentó huelga para los días 5, 13, 20 y 27 de diciembre en el aeropuerto de Málaga, y afecta a los trabajadores cuyas funciones son las de facturación, carga y descarga de los equipajes, embarque de pasajeros y venta de billetes.
El responsable del sector aéreo de UGT Málaga, Fernando Barba, indicó que la huelga está convocada por unanimidad y manifestó que los motivos para convocarla son el "incumplimiento sistemático del convenio colectivo de Iberia tierra, precariedad laboral a la que se ve sometida la plantilla de trabajadores, sanciones indiscriminadas y la no comunicación al comité de empresa de la programación y cambio de turnos a los trabajadores de la plantilla".
Barba explicó que la empresa no ejecuta la sentencia en firme ganada en Málaga sobre el derecho de parking exclusivo para los trabajadores de Iberia ni la Ley de Prevención sobre medidas organizativas al no cumplir con las rotaciones en los puestos de trabajo.
Asimismo, señaló el "mal estado y mal mantenimiento" de los equipos de tierra y las instalaciones, así como la "sobrecarga" de trabajo de la plantilla por falta de una programación de horas adecuada a la realidad operativa.
