Actualizado 14/05/2008 17:56

Intermón Oxfam pide a Repsol que respete a los indígenas y Brufau dice que hará un decálogo de actuación

MADRID, 14 May. (EUROPA PRESS) -

La ONG Intermón Oxfam denunció hoy en la junta de accionistas de Repsol YPF el "maltrato" por parte de la petrolera a los pueblos indígenas y pidió a la compañía que respete a estos grupos, a lo que el presidente de la compañía, Antonio Brufau, respondió diciendo que en la actualidad la empresa trabaja en la elaboración de un decálogo de actuación que garantice el respeto a estas comunidades.

La ONG logró hacerse oír en la junta gracias a la firma de propietarios de 82.000 acciones, y dijo hacerlo en defensa de los intereses de los cerca de 34 millones de indígenas repartidos en 14 países del mundo. Según la organización, Repsol no respeta los derechos de la Declaración de Naciones Unidas y debe establecer una "política de respeto" con los pueblos indígenas.

Los representantes de Intermón Oxfam pidieron consultas "libres, previas e informadas" acerca de los proyectos de la petrolera, en las que se establezcan procedimientos "transparentes". Estas consultas deben actuar como un remedo de "licencia social para operar". La ONG dijo tener además el respaldo de 11.000 firmas de ciudadanos.

Brufau agradeció el tono "respetuoso" de las críticas y afirmó que la compañía quiere hacer el trabajo "bien" en su relación con las comunidades indígenas, por lo que está "en proceso de hacer una política pública para establecer un decálogo de actuación" con respecto a estos grupos.

El presidente de la petrolera recordó que en el Bloque 39, situado en la Amazonia peruana, se ha analizado la biodiversidad de la zona y las condiciones de vida de los indígenas. La compañía dice estar "abierta" a cualquier esfuerzo de mejora de sus relaciones con los indígenas y trabaja con el Banco Mundial, Transparencia Internacional y Adena en la elaboración de informes de sostenibilidad.

Durante la junta, la firma de inversión Boston Common Assets Managemment, que gestiona recursos por 1.000 millones de dólares, pidió que la petrolera sólo opere en zonas indígenas en las que se haya realizado previamente una consulta informada, lo que redundará en la mejora de su imagen y del rendimiento de su negocio.