MADRID, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Ministros va a acordar este viernes una partida adicional de 117 millones para garantizar el nivel mínimo de protección del Sistema de Atención a la Dependencia (SAAD) ante el aumento de 21.252 beneficiarios en 2012. De esta forma, el crédito final asciende a 1.405 millones de euros, 119 más que en 2011, según han confirmado a Europa Press fuentes del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Esta ampliación del crédito no se trata de una medida excepcional sino del cumplimiento de la financiación prevista en la Ley para la Autonomía Personal y la Atención a las Personas en Situación de Dependencia, que Sanidad ha tenido que negociar con el Ministerio de Hacienda para atender a las personas que han pasado a formar parte del sistema con la prestación correspondiente reconocida.
Con esta medida, el departamento de Ana Mato pretende garantizar el nivel mínimo de protección, en medio de las restricciones presupuestarias. Con la reforma del Sistema de Atención a la Dependencia, aprobada este verano, el Ejecutivo ha reducido el gasto en 835 millones de euros. Entre las medidas ejecutadas desde julio destaca la reducción del 15 por ciento de la prestación por cuidado familiar, que acumulaba más de la mitad de las ayudas de la ley, pese a que debía ser una excepción.
Otra de las iniciativas que han supuesto un ahorro para el Estado, según Sanidad, ha sido la simplificación de los niveles de dependencia de seis a tres, junto a la moratoria hasta 2015 de la entrada de los dependientes 'moderados' al sistema o el 'copago' por parte de los beneficiarios, que deben contribuir a los servicios prestados, en función no sólo de la renta sino también del patrimonio.
La lista de espera --beneficiarios con grado y prestación reconocida, pero todavía sin atender-- se ha reducido, según las mismas fuentes, desde principios de año en 74.000 personas, pasando de 305.941 a 231.284. Esto se debe a la moratoria en la entrada de los 'moderados', que según el Gobierno, están siendo atendidos a través los Servicios Sociales, a que algunas personas han pasado al sistema privado o al ajuste de las estadísticas por las defunciones.
