MÉRIDA 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Grupo de Mecánica y Transporte de la Universidad de Extremadura (UEx) tiene previsto patentar a lo largo de este año un nuevo mecanismo de propulsión para sillas de ruedas.
Este mecanismo, según indicó la UEx en una nota de prensa, permitirá "superar la ineficiencia energética de los sistemas actuales" y evitará las habituales lesiones en la columna vertebral y en las muñecas que sufren los usuarios de estas sillas, tal y como explica el coordinador del Grupo de Mecánica y Transporte, Francisco Javier Alonso.
La idea es "rediseñar" el mecanismo que utilizan estas sillas y acoplarle una transmisión de engranajes, de modo que los discapacitados que utilicen las sillas patentadas por la UEx podrán superar manualmente pendientes y beneficiarse de una mayor comodidad, ya que "está demostrado que el discapacitado se siente más útil cuando es él mismo quien se propulsa", señala Alonso.
El proyecto se enmarca dentro del Plan Propio de Investigación de la Universidad de Extremadura y "en breve" se llevarán a cabo los trámites para patentarlo, pues en la actualidad "se están ultimando los detalles de su construcción".
Otra de las ventajas de este sistema, añade la UEx, es su "total compatibilidad" con los mecanismos asistidos, que son "los más extendidos" entre los usuarios, lo que significa que "con unas mínimas modificaciones" se adaptarán "la práctica totalidad" de las sillas de ruedas utilizadas en la actualidad, ya que "cuando la demanda de potencia sea muy grande podrá entrar en marcha el motor eléctrico y, cuando sea pequeña, lo podrá hacer manualmente", apunta el coordinador del Grupo.
El trabajo de este grupo formado por cuatro investigadores también abarca otra línea centrada en "el diseño, construcción y ensayo de engranajes planetarios".
Estas transmisiones, recreadas en los laboratorios de la Escuela de Ingenierías Industriales de la UEx están presentes en automóviles, helicópteros, ascensores y maquinaria empleada para controlar la relación entre las velocidades de dos ejes y el par transmitido, señala Francisco Javier Alonso.
Así, para determinar las transmisiones óptimas, el grupo analiza el flujo de potencia de cada una de las soluciones constructivas y "selecciona las que ofrecen un mejor rendimiento energético".
Finalmente, para el coordinador del grupo el siguiente reto será crear una transmisión definida como continuamente variable, que tenga la ventaja de adaptarse eficazmente a las diversas necesidades de potencia.
Buena parte de estos proyectos han sido desarrollados conjuntamente por expertos de la Universidad de Extremadura y de la Universidad de Sevilla, según informa la institución universitaria.