MÁLAGA, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un jurado popular tiene previsto juzgar desde hoy lunes día 16 a una mujer acusada del asesinato de su marido en Mijas (Málaga), con el que se llevaba mal desde hacía varios años y que, según el fiscal, la habría maltratado incluso, para lo que planeó acabar con su vida junto con dos hombres, también procesados en este caso, llegando presuntamente a encargarle el asesinato a uno de ellos a cambio de dinero.
La relación entre la mujer y la víctima, según relata la acusación en calificación inicial a la que tuvo acceso Europa Press, se había deteriorado hasta el punto de que "eran frecuentes los insultos amenazas e incluso el maltrato físico" por parte de la víctima contra la acusada, por lo que decidió poner fin a la situación que vivía "quitándole la vida a su marido".
Así, en abril de 2003, la esposa conoció por motivos laborales a uno de los procesados, con el que llegó a intimar, y le dijo que estaba ahorrando para "contratar a una persona que matara a su marido", según el escrito, por lo que éste le puso en contacto con el tercer acusado, empleado suyo, "que por 15.000 euros acordó realizar el trabajo".
Según las conclusiones provisionales, la mujer compró una pistola, para la que carecía de licencia. El día 15 de julio de 2003 los tres quedaron para acordar quién iba a disparar. El relato apunta que al día siguiente, la mujer disolvió unos tranquilizantes en los medicamentos que tomaba su marido, que se fue a dormir la siesta, tras lo que avisó a los dos hombres.
En el momento de disparar, el acusado que tenía que hacerlo fue incapaz, por lo que, según el escrito inicial, la mujer que estaba en la habitación cogió el arma y desde muy corta distancia disparó contra la cabeza de su marido. Cuando la Policía tomó declaración a la esposa del fallecido, ésta confesó su participación en los hechos y la de los otros dos acusados.
Para la acusación, los hechos constituyen un delito de asesinato y otro de tenencia de armas prohibidas de los que acusa a los tres, pidiendo por el primero 25 años de prisión para cada uno de dos hombres y 20 años para la mujer, y por el segundo dos años para los procesados y seis meses para la acusada, a la que también acusa por un delito de apropiación indebida y de otro contra la salud pública.
