Actualizado 15/09/2008 19:16

Juzgan mañana al acusado de matar a su mujer de 40 puñaladas en La Rinconada (Sevilla)

El procesado, funcionario de prisiones, tenía dos hijos pequeños con la víctima y se entregó a la Policía tras el asesinato


SEVILLA, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Sevilla juzgará mañana al funcionario de prisiones de 40 años, identificado como R.S.N., acusado de matar a su mujer de 40 puñaladas y 14 golpes en la cabeza mientras la víctima dormía en su domicilio de San José de la Rinconada en febrero de 2006. Por tales hechos, la Fiscalía reclama una pena de 28 años de prisión para el inculpado.

Según el escrito de acusación provisional del fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, el procesado, que tenía con su compañera sentimental un niño de seis años y una niña de dos, decidió acabar con la vida de M.A.R. de forma "premeditada, fría, cobarde y brutal" cuando supo que ésta pretendía separarse de él.

La idea de la ahora fallecida de terminar con el matrimonio tuvo su origen casi al inicio de la relación matrimonial en 1998 por la actitud de "hostilidad, frialdad, desvaloración y control" que el acusado le mostraba; circunstancia que --según prosigue el fiscal-- "fueron poco a poco minando la autoestima" de la madre de sus hijos

Asimismo, el hecho de que el inculpado fuera la única persona que aportaba ingresos en su casa le servía para ejercer sobre ella "un control total de tipo económico", sin que la víctima "tuviera la más mínima autonomía ni decisión sobre los aspectos más cotidianos e intrascendentes". Dicho control provocó en M.A.R., agrega el representante del Ministerio Público, una "sintomatología caracterizada por insomnio, tristeza, miedo, confusión, impotencia, desesperanza, culpa o aislamiento", entre otros.

Toda la situación descrita provocó que la víctima planteara al marido su deseo de separarse en el año 2001, si bien no fue hasta 2006 cuando comenzó a asesorarse en el Centro de Información para la Mujer de San José de La Rinconada, llegando incluso a dejar de dormir con el presunto asesino. El procesado, lejos de aceptar la situación, comenzó tomar medicamentos para combatir el insomnio y la ansiedad.

"VEN CORRIENDO POR MIS NIÑOS QUE LA HE MATADO"

Así las cosas, en la madrugada del 4 de febrero de 2006, R.S.N. esperó a que sus hijos y esposa estuvieran dormidos para perpetrar el crimen. El fiscal explica que sobre las 2.00 horas entró en el dormitorio que dormían tanto el hijo de seis años como la madre y sacó al pequeño "con sigilo" para acostarle en la misma habitación que su hermana.

Inmediatamente después cogió dos cuchillos, uno de los cuales tenía una figura sobre una esfera en bronce macizo, se puso a "horcajadas" sobre la víctima y "comenzó a golpearla en la cabeza --hasta 14 golpes-- con la figura de bronce, que se rompió en varios trozos. A continuación cogió el cuchillo jamonero y "le propinó 40 cuchilladas" repartidas por todo el cuerpo que terminaron con la vida con M.A.R.

Una vez muerta, el acusado llamó a su hermana y, según relata el fiscal, le dijo: "ven corriendo por mis niños que la he matado". De igual forma, llamó a la Policía y narró lo sucedido, por lo que varios agentes municipales y del Instituto Armado se trasladaron al lugar de los hechos, donde el presunto asesino esperaba con el pantalón manchado de sangre y una botella de whisky medio vacía. Una vez que los agentes comprobaron los hechos, el acusado espetó: "la hija de puta creía que no iba a tener huevos".

El Ministerio Público considera que los hechos relatados son constitutivos de un delito de asesinato, por el que pide 25 años de prisión; y un delito del artículo 173.2 del Código Penal (De las torturas y otros delitos contra la integridad moral), por el que solicita tres años de prisión. Además, el fiscal entiende que el acusado debe indemnizar a cada uno de sus hijos con 300.000 euros por los perjuicios causados.

Los hechos comenzarán a ser juzgados a las 10.00 horas de mañana en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla.