MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Araceli Mangas, doctora en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, ingresó en 2014 en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas de España, apenas unos años después de que Adela Cortina, catedrática de Ética y Filosofía Política en la Universidad de Valencia, rompiera la exclusividad masculina y se convirtiera en la primera mujer de la institución, fundada en 1857.
"Las academias son un reflejo del inconsciente machista de la sociedad española", ha manifestado Mangas durante una entrevista concedida a Europa Press con motivo del Día de la mujer trabajadora que se celebra este miércoles 8 de marzo.
Mangas, poseedora de una amplia y reconocida trayectoria en el campo del derecho internacional y comunitario, está convencida de que en las academias no está representado el "alto nivel que tienen bastantes mujeres en España" y que a su juicio "es comparable al de los hombres".
Precisamente, la lexicógrafa y doctora en Filología Románica Paz Battaner, que ingresó el pasado mes de enero en la Real Academia Española (RAE), llamó la atención en declaraciones a Europa Press sobre la necesidad de "feminizarlo todo" y pidió poner el foco en otras instituciones como la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, y no solo la RAE, que ha tenido un total de 11 académicas en sus 304 años de historia.
"Debería haber más presencia en esta academia y en otras en la que es muy minoritaria o casi simbólica", ha resaltado Mangas, quien critica que la institución de la que es miembro solo cuenta con dos mujeres de un total de 43 medallas.
Preguntada por los motivos, Mangas cree que "hay todavía resortes inconscientes en la mente de las personas" que hacen que no se consideren los méritos de mujeres que "podrían estar sin duda en la Academia".
PROCESO "LENTO" Y SIN CUOTAS
No obstante, ha señalado que no está de acuerdo con las cuotas en la elección de miembros de la Academia, a pesar de que reconoce que es "muy doloroso" el proceso "lento" para llegar a la igualdad, porque "los hombres todavía se aferran a la presunción de que los hombres que son buenos son mucho mejores que mujeres". "Eso habrá que ir desmontándolo con tiempo y con paciencia", ha dicho.
A su juicio, para conseguir igualdad entre hombres y mujeres cree que habría que poner atención a los lugares de representación, tales como el Consejo de Estado, el Tribunal Constitucional o el Supremo que, según recalca solo cuenta con 13 mujeres como presidentas de audiencias provinciales. Además, pide un cambio en las instituciones públicas por parte del Estado, así como un cambio de mentalidad en las familias y los medios de comunicación.
"Los hombres suelen elegir a hombres, en muy pocas ocasiones se abren a los méritos de mujer", ha lamentado Mangas, quien critica también que las mujeres solo son merecedoras de premios relacionados con la solidaridad o la acción social, pero están ausentes en las candidaturas a galardones relacionados con las humanidades, las ciencias o la sociología.
En cuanto a las declaraciones de un eurodiputado polaco, quien afirmó que las mujeres son menos inteligentes y han de cobrar menos, la académica cree que estas declaraciones "no son representativas de la sociedad general" y además apunta que en el Gobierno de Polonia hay personas "con una mentalidad de extrema derecha y casi fascista".
