La Generalitat valenciana destinará 350.000 euros para promover la igualdad de la mujer en África y combatir la ablación

Europa Press Sociedad
Actualizado: lunes, 14 julio 2008 14:23

VALENCIA 14 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Generalitat valenciana invertirá 350.000 euros para la realización de la segunda fase de un proyecto encaminado a promover la igualdad de la mujer en África y combatir la ablación genital a través de aulas de estudio, la rehabilitación de dos centros de salud y la sensibilización a comunidades en los temas de género y Derechos Humanos.

El consejero valenciano de Inmigración y Ciudadanía, Rafael Blasco, ha podido comprobar in situ la situación personal, laboral y económica de la población que reside en los distritos de Tedele y Kebena, unos 156.000 habitantes, y donde el 73 por ciento de las niñas están sufriendo la mutilación genital. "Tenemos que concienciar a la población que estas costumbres no son buenas", señaló Blasco tras visitar estos emplazamientos.

Blasco estuvo acompañado por la directora general de Cooperación y Solidaridad, Carmen Dolz, y por los presidentes de las entidades, Fundación por la Justicia y Kembatta Women's Self Help Center (KMG), que llevarán a cabo la segunda fase de uno de los proyectos "más decisivos para terminar con esta brutal práctica", destacaron fuentes de la Conselleria de Inmigración.

De este modo, la presidenta de KMG, Bogaletch Gebre, defensora de los derechos de las mujeres y lucha contra las prácticas de mutilación genital femenina, de las que ella fue víctima, explicó que "los padres nunca harían nada que fuera malo para sus hijos, pero la cultura dice que una mujer con clítoris no es pura. Y los hombres instigan esa práctica al negarse a casarse con una mujer que no ha sido mutilada". Además, señaló que, aunque a nivel de políticas de educación, Etiopía no es discriminatoria contra la mujer, en algunas zonas un 94 por ciento de las mujeres no tienen ninguna escolaridad.

Por otra parte, el presidente de la Fundación, José María Tomás y Tío, apuntó que "la ablación es ilegal, pero apenas acarrea castigo alguno. La normativa impone una leve pena de 40 euros de multa y tres meses de arresto domiciliario. Sobre todo en las zonas rurales, cualquiera puede mutilar a una mujer".

Blasco comentó que el pasado año la Fundación por la Justicia reconoció y premió el esfuerzo de KMG, concediéndole su VI Premio Fundación por la Justicia a su presidenta Bogaletch Gebre, y empezó la colaboración entre las dos organizaciones con la financiación de la Generalitat.

Desde entonces se está ejecutando el 'Proyecto para reducir la discriminación y la violencia contra la mujer en todos sus aspectos: mutilación genital femenina, matrimonio por rapto, violencia doméstica, etc., en los distritos de Tedele y Kebena (Región de Guraghe), Etiopía'.

Así, se ha llegado a un acuerdo para seguir trabajando en la zona durante los próximos tres años. El Consell destinará aproximadamente 350.000 euros. Tras conocer el terreno, los expertos han encontrado los problemas o prioridades en cuanto a la intervención que se viene realizando en la zona.

Los habitantes de la Región de Gurage son la mayoría de ellos desplazados internos pertenecientes a 13 grupos étnicos, que se han ido instalando en la zona por causa de las guerras y hambrunas que ha sufrido el país tras los últimos años. En esta zona, las prácticas dañinas tradicionales son muy frecuentes y diversas, debido al origen de procedencia de cada uno de los grupos étnicos.

La falta de acceso a la educación es otro problema serio identificado en la zona. El Plan Nacional del Gobierno Etíope pretende conseguir una educación primaria en los próximos 5 años para todos los niños del país, aunque se encuentra prácticamente sin instalaciones ni material escolar suficiente para ofrecer una educación de calidad. Como consecuencia de todo esto el grado de analfabetismo es muy alto. En el distrito de Kebena con una población de 65.472 personas, solamente 10 personas terminaron la educación secundaria.

Sobre la situación de la Salud en la Región de Gurage, podemos decir que la asistencia sanitaria es inexistente. Únicamente existen dos unidades de salud para una comunidad con más de 156.000 habitantes. No existe ningún doctor en la Región y estas unidades o centros de salud están prácticamente en ruinas y lógicamente con escaso equipamiento. Los centros están muy lejos (15-20 Km) de la mayoría de los pueblos y muchos enfermos mueren en el camino. En resumen, por la ineficacia de estos centros de salud muchas madres y niños mueren por complicaciones en el parto; muchos mueren de enfermedades preventivas como la malaria.

En este sentido, el conseller avanzó que durante los próximos años se intervendrá en otros sectores como la educación, la salud, el género, democracia, derechos humanos y fortalecimiento económico.

Blasco destacó que "el derecho de la mujer a no sufrir ningún tipo de violencia es difícil de comprender sin considerar todos los problemas. Así que para conseguir nuestros objetivos debemos tratar de vincular los sistemas económicos, sociales y políticos a las necesidades básicas de estas comunidades".

Por lo tanto, la Fundación por la Justicia propuso seguir trabajando con el apoyo de la Generalitat para erradicar toda forma de violencia contra la mujer.

CASAS SEGURAS

En materia de educación el programa permitirá construir aulas de estudio para educación primaria y secundaria así como de la dotación de materiales, establecimiento de casas de estudiantes que servirían como "casas seguras" para supervivientes de violencia y se apoyará a niñas y niños a retomar sus estudios primarios, secundarios y superiores.

También, se llevará a cabo la rehabilitación de los dos centros de salud ya establecidos por la comunidad y se dotarán de materiales y de al menos dos médicos a la Región; se facilitará la formación a amas de casa y enfermeras profesionales para personal de apoyo, se construirán pozos de agua y de puentes que comuniquen a las comunidades con los mercados y a los niños con los centros de estudios. Finamente, recalcó la necesidad de realizar campañas de prevención del VIH/sida y de iniciar pequeños programas de microcréditos con mujeres.

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