Actualizado 10/12/2008 17:51

Visto para sentencia el juicio contra un guardia civil por la muerte de un inmigrante en Tarifa

ALGECIRAS (CÁDIZ), 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

La sección de Algeciras (Cádiz) de la Audiencia Provincial dejó hoy visto para sentencia el juicio contra un agente de la Guardia Civil acusado de homicidio imprudente por el fallecimiento de un inmigrante mediante un disparo en diciembre de 2000 ocurrido en Tarifa.

Según indicaron a Europa Press fuentes cercanas al caso, la Fiscalía, que en principio pedía un pena de entre uno y cuatro años de prisión, retiró la petición de condena al considerar probado que el disparo efectuado por el agente del Instituto Armado que terminó con el fallecimiento del inmigrante se produjo de manera fortuita.

Por su parte, la acusación particular representada por la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDH-A) mantuvo su petición de dos años de prisión para el agente, ya que consideró que "no ha quedado probado que el disparo fuera fortuito".

Además, señaló que "aunque hubiera sido fortuito, el mero hecho de llevar el arma cargada y montada y haber hecho un disparo anterior al aire, ya es una negligencia profesional que contradice la Ley que la Guardia Civil mantiene para este tipo de circunstancia".

Los hechos ocurrieron el 3 de diciembre del año 2000 cuando el agente estaba de servicio y se interceptó una patera con inmigrantes irregulares en Tarifa. Tras darle el alto, que no respetaron los ocupantes de la embarcación, una vez que la patera llegó a tierra se produjo un forcejeo entre los dos hombres y se produjo un disparo que alcanzó a uno de los inmigrantes, que finalmente falleció.

Previamente a este forcejeo, ante el intento de huída, el agente realizó un disparo al aire como aviso y se produjo una persecución, en la que el agente llevaba una linterna en una mano y el arma en la otra, llegando a alcanzar al inmigrante que empujó al agente e intentó escapar. En ese instante, presuntamente de manera fortuita, el arma se disparó.

En principio, la causa fue considerada como una falta, pero la APDH-A logró que el juzgado de instrucción tramitase el caso como un homicidio imprudente. El juzgado instructor del caso fue el número cuatro de Algeciras y aunque el 6 de febrero de 2004 dictó una resolución en la que consideraba el hecho como una falta, la apelación de APDH-A permitió reabrir el caso y finalmente lograron que la Audiencia determinase la posibilidad de considera el suceso un homicidio imprudente, el cual se ha juzgado hoy.