Asegura que "de nada sirve emitir fallos judiciales condenatorios si luego no se cumplen" y aboga por "multiplicar" el número de jueces
HUELVA, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Audiencia Provincial de Huelva, Jesús Fernández Entralgo, consideró hoy "muy grave" desde el punto jurisdiccional "crear una historia asumida socialmente de lo que ocurrió" el día de la muerte de la pequeña Mari Luz Cortés "cuando todavía se está investigando lo que sucedió", subrayando que "no se puede dar ningún hecho como real hasta que se pruebe", en relación a la supuesta autoría de Santiago del Valle, internado en la prisión de Albolote (Granada) como presunto autor de los hechos.
Fernández Entralgo insistió en que este caso "está pendiente de investigación y enjuiciamiento", por lo que defendió que "si se llega a juzgar al que hoy es imputado, éste entrará en el Palacio de Justicia beneficiado por la presunción de inocencia y no podrá ser condenado si no se prueba más allá de toda duda razonable lo que el Ministerio Fiscal y la acusación particular afirmen que ha ocurrido".
"Estas son las reglas del juego y lo que el Tribunal Constitucional e incluso la cultura del Derecho Penal democrático han exigido siempre", según indicó en una entrevista concedida a Europa Press el presidente de la Audiencia, quien quiso referirse a los "nervios" que este caso "han suscitado en todas las personas e instituciones relacionadas con él, que nos apresuramos a descargarnos de responsabilidad".
Del mismo modo, Fernández Entralgo mostró su desacuerdo con el hecho de hablar de 'juicios paralelos', "pues el juicio en sí sólo será uno y lo demás serán opiniones, investigaciones particulares más o menos respetables o hipótesis", pero incidió en que el juicio "es el que se está desarrollando en una instrucción dirigida por una jueza en coordinación con la Fiscalía, la acusación particular y la defensa".
Preguntado por la condena dictada por el Juzgado de lo Penal número 1 de Sevilla contra Santiago del Valle y que éste no llegó a cumplir, indicó que en las estadísticas judiciales "un caso penal concluye cuando se dicta sentencia, mientras que la fase de ejecución es como si no tuviera importancia, cuando la tiene y mucha", ya que "hay que garantizar que quien ha sido condenado cumpla la pena que le ha sido impuesta, cuando antes mejor".
"RESISTENCIA" DE LA JUSTICIA A LAS TECNOLOGÍAS.
Asimismo, Fernández Entralgo subrayó que "parece como si un caso sentenciado se terminara en este punto, pero es entonces hay que hacer ejecutar la sentencia cuanto antes", al tiempo que aseguró que "de nada sirve emitir fallos judiciales condenatorios si luego no se cumplen o no se pueden cumplir, pues es un trabajo negro y oscuro que, sumado al del juicio, desborda definitivamente el trabajo del juez".
Tras lamentar que "parece como si en la Administración de Justicia hubiera una resistencia o una falta de imaginación para aplicar los medios que brinda hoy día la tecnología", el presidente de la Audiencia señaló que "el problema se produce en las penas cortas privativas de libertad en las que el acusado está en libertad provisional, ya que hay que localizarlo y que entre en prisión".
"Ahí es donde se producen las grandes bolsas de inactividad procesal y ese es el reto, cómo conseguir que todas esas condenas se cumplan lo más rápidamente posible", apuntó Fernández Entralgo, quien explicó que estas bolsas "están muy relacionadas con la capacidad de asumir carga de trabajo", señalando que "es un error pensar que todo se soluciona si hay más personal ayudante del juez, que al final es el cuello de botella donde va todo el trabajo que está realizando la oficina judicial".
"MULTIPLICAR" EL NÚMERO DE JUECES.
Así, indicó que si esta oficina judicial "es muy eficaz y produce mucho trabajo que al final se acumula en una única persona, el fracaso está servido", al tiempo que apuntó que "lo importante no es tanto multiplicar el personal asistente y ayudante como multiplicar el número de personas que deben resolver, como son los jueces".
Por último, Fernández Entralgo reivindicó que la Administración de Justicia "no es un trabajo cualquiera al que una persona pueda incorporarse sin conocimientos previos, y eso está sucediendo en justicia, aunque ahora tímidamente están empezando a organizarse cursos de preparación para bolsas de trabajo", criticando que "la persona que llega a un juzgado o sección de audiencia se encuentra con que nada sabe del trabajo que tiene que realizar y tiene que ser enseñado por el compañero". "Hay que hacer frente a esto", concluyó.
