HUELVA 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos del Torrejón, el barrio onubense donde residía la pequeña Mari Luz, que apareció muerta en la ría de Huelva tras dos meses desaparecida, lucirán mañana en la concentración prevista en la plaza de la Rosa lazos morados en solidaridad por "la penitencia" que están pasando los familiares después de conocer la sanción impuesta al juez de Sevilla Rafael Tirado, que no ejecutó una sentencia contra el presunto asesino de la pequeña.
En declaraciones a Europa Press, el padre, Juan José Cortés, apuntó que esta penitencia se debe "a las injusticias que se están produciendo y otras más que se producirán y que padecerán todos los españoles, si este error no se remedia" ya que la Comisión Disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) confirmó el miércoles que Tirado, investigado por no ejecutar una sentencia pendiente por malos tratos contra el presunto asesino de la niña, Santiago del Valle, cometió una "falta grave", por la que deberá abonar 1.500 euros.
Cortés indicó que esta concentración tendrá lugar mañana a partir de las 17,00 horas y que algún vecino "leerá un manifiesto en contra de la sanción" al juez Tirado que la familia considera "indignante" y gracias a la que "no confía en la justicia".
En cuanto al encuentro con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el padre de la niña apuntó que se reencontrará con el presidente en la Moncloa "en el plazo de dos semanas", donde le entregará en mano los dos millones de firmas recogidas "para mostrar el rechazo a la sanción y que reivindican una justicia justa".
En este sentido, indicó que espera que el apoyo por parte de Zapatero se haga "manifiesto y realidad" y que la Fiscalía recurra para que finalmente se llegue a una "justicia justa".
Por otro lado, el padre de la niña ya señaló que en estos momentos "todo está en manos de la Fiscalía", quien propuso elevar esa sanción a falta "muy grave", penada con una suspensión de hasta tres años, traslado forzoso o incluso apartarle de la carrera judicial, a lo que añadió que los familiares de la pequeña "no pueden hacer nada y que lo único que esperan es que la Fiscalía recurra".
Y es que hasta el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció su "desacuerdo" con la decisión del CGPJ y mostró a la familia onubense su "apoyo".
A partir de ahora se abre un plazo no superior a un mes en el que previsiblemente el Ministerio Público recurrirá la decisión de la comisión Disciplinaria ante el pleno del CGPJ. Es por ello que previsiblemente será el nuevo consejo surgido tras la renovación el que tenga que determinar la decisión final.
Por su parte, Tirado recurrirá la decisión de la Comisión Disciplinaria del CGPJ de sancionarlo por tres votos a dos con una "falta grave", al entender su abogado que "no cometió ninguna conducta que deba ser reprochable".