MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Ministerio del Interior iraquí, Abdul Karim Jalaf, informó ayer de que soldados iraquíes reclutaron a seis adolescentes en la zona noreste de Irak y en contra su voluntad, para que llevaran a cabo ataques suicida para la red terrorista Al Qaeda en el país, según informó la cadena estadounidense CNN.
Las tropas se dirigían casa por casa en la ciudad de Mosul, en busca de seis jóvenes con edades comprendidas entre 15 y 18 años, con el objetivo de entrenarles para perpetrar ataques suicidas contra las fuerzas de seguridad iraquí, dijo Karim Jalaf.
Los insurgentes han amenazado con matar a los adolescentes o a sus familiares si ellos se niegan a cumplir con el entrenamiento, dijo Ali Hussein Kamal, el jefe de inteligencia del ministerio del Interior.
"Los insurgentes saudíes amenazaron con violar a nuestras madres y hermanas, destruir nuestras casas y matar a nuestros padres si no cooperábamos con ellos", dijo uno de los jóvenes en Mosul. Los niños fueron reclutados como parte de la operación 'Madre de las dos primaveras' desarrollada en Mosul y en la provincia de Nínive.
Se teme que uno de los sospechosos pertenecientes a la operación, es un saudí que forma parte de los entrenadores terroristas que murió en una operación militar, aunque se desconocen las causas y el lugar de su muerte. Dentro del grupo de adolescentes reclutados, se encontraban el hijo de una mujer médico, el hijo de un profesor de universidad, y cuatro jóvenes pertenecientes a a familias de vendedores pobres.
Los seis jóvenes fueron entrenados para llevar a cabo ataques suicidas con cinturones bomba, y ya estaba fijada la fecha para que cada uno de ellos perpetrara el atentado, según informó Hussein.
Las tropas iraquíes se llevaron a los niños el mismo día que un terrorista suicida que conducía una motocicleta se estrelló contra un puesto de control de la Policía y de un grupo de seguridad iraquí en el noreste de Irak, matando a seis personas e hiriendo a otras 22, según informaron agentes de Policía local. La explosión tuvo lugar el pasado lunes en Tarmiya, en la provincia de Salaheddin.
