MANILA 27 Feb. (Reuters/EP) -
Los habitantes del sur y el centro de Filipinas han comenzado la reconstrucción de sus casas mientras se reduce el número de inundaciones tras dos semanas de fuertes lluvias en las que 23 personas han perdido la vida y 10 personas han desaparecido, indicaron hoy fuentes oficiales.
"Estamos volviendo a la normalidad", comentó el gobernador del estado de Samar, Ben Evardone, una de las cuatro áreas declaradas en estado de catástrofe.
Cientos de miles de personas están regresando a sus hogares, a pesar que algunas partes de la provincia se encuentran aún inundadas.