Actualizado 30/09/2008 13:36

Aborto.- De la Vega apuesta por una nueva ley porque la antigua "no funciona"

La vicepresidenta recuerda que el Gobierno "es de izquierdas" por lo que su posición frente a la Iglesia es de "separación y autonomía absoluta"


MADRID, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández De la Vega, apostó hoy por una nueva ley del aborto que garantice la actuación de los profesionales y de las mujeres, ya que el aborto es una situación "difícil, dolorosa y complicada", y la actual ley "no funciona".

Así, en declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Europa Press, la vicepresidenta recordó que la actual ley ha puesto de manifiesto en determinadas situaciones que "no funciona", por lo que prometió hacer "la mejor ley" que garantice tanto la actuación de los profesionales como de las mujeres, donde se respete "su intimidad, la equidad en el acceso a la prestación cuando esa situación se produce y el respeto", aclaró.

"Tiene que haber una modificación de la ley que esté inspirada en los sistemas más acreditados de europa que den solución a las garantías y a los derechos de las mujeres y de los profesionales que pasan por la difícil situación de tener que interrumpir de forma voluntaria un embarazo no deseado", comentó.

Asimismo, en cuanto a la Ley de Dependencia, De la Vega recordó que su gestión está compartida con las comunidades autónomas, por lo que la situación desigual entre comunidades es por quien lo gestiona.

"Desde el gobierno estamos aportando los medios y la financiación necesaria para que las personas tengan ayudas , la ley de dependencia otorga derechos y reconoce ayudas para hacer frente a situaciones difíciles, dolorosas y complicada", indicó.

"SEPARACIÓN Y AUTONOMÍA ABSOLUTA" DE LA IGLESIA

Por otro lado, en cuanto a la revisión del concordato Iglesia y el Estado, la vicepresidenta primera del Gobierno apuntó que el Gobierno socialista "es de izquierdas", que se demuestra en sus políticas sociales, por lo que su posición frente a la Iglesia es de "separación y autonomía absoluta".

"Cada uno tiene su espacio, actuamos de forma independiente, vivimos en un estado aconfesional y laico que significa la no interferencia en los asuntos religiosos en los temas públicos y a partir de ahí mantenemos el modelo constitucional de respeto absoluto, separación y en algunos supuestos cooperación y diálogo. Vamos a seguir manteniendo todos nuestros compromisos al margen de las opiniones que puedan tener la Iglesia Católica u otras confesiones", explicó.

Acerca de la asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC), afirmó que el Gobierno llegó a un acuerdo con la Federación Española de Religiosos de Enseñanza (FERE) y el boicoteo o incumplimiento en algunos supuesto de la Ley se está produciendo en algunas comunidades autónomas instigadas por los poderes públicos. "Discrepo totalmente de lo que diga la Iglesia en este tema, aunque me parece peor que desde los poderes públicos se llame al incumplimiento de la ley", incidió.