La CECU cierra la tercera edición de su campaña 'Turista responsable' centrada en el ahorro energético en las ciudades

MADRID 14 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) cerró hoy la tercera edición de su campaña 'Turista responsable', centrada en conseguir una mayor eficiencia en la utilización de la energía de los turistas que optan por pasar sus vacaciones en las ciudades.

Consciente de que, este año, debido al actual contexto económico, a los turistas que acuden a las grandes urbes hay que sumar la gente que se queda en su lugar de residencia, la organización de consumidores recomienda observar una serie de recomendaciones para reducir la contaminación en las ciudades.

Así, en un comunicado, la CECU aconseja utilizar el aire acondicionado "sólo si es necesario" y, en caso de hacerlo, poner el termostato "alrededor de los 25 grados". No obstante, subraya que "es preferible pasar sin él", abriendo las ventanas de la casa o usando ventiladores.

Además, recuerda que la lavadora y el lavavajillas deben estar llenos cuando se usen y es "preferible" usar el gas antes que la electricidad para ahorrar energía. Con el mismo propósito, recomienda apagar las luces cuando no sean necesarias, utilizar bombillas de bajo consumo o evitar la posición de 'stand-by' de los electrodomésticos.

En cuanto al comportamiento respecto al transporte, la CECU afirma que es mejor para el medio ambiente "caminar, ir en bici o coger el transporte público" y, si se alquila un coche, mejor optar por uno con gasolina sin plomo y, a la hora de conducir, no dar acelerones ni frenazos bruscos.

Por otro lado, advierte de que el reciclaje es "otra medida importante que contribuye, no sólo a ahorrar energía, sino también materias primas", por lo que insta a desechar la basura orgánica en los contenedores habituales, y el plástico, las latas, el vidrio, el papel, las pilas y los medicamentos, en sus contenedores correspondientes.

Asimismo, señala que el aceite usado nunca se debe tirar por el desagüe, sino utilizar los contenedores destinados a tal uso o, en caso de que esto no sea posible, tirarlo a la basura orgánica dentro de un bote.