BEIJING, 8 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -
El brote de fiebre aftosa humana que golpea a la población infantil de buena parte de China se ha vuelto a cobrar otras dos víctimas, por lo que el balance actual se sitúa, según los últimos datos oficiales, en 30 muertos y 19.962 infectados.
Las nuevas víctimas, dos niños infectados con el virus intestinal EV71, procedían de la isla de Hainan (sur), en la que hasta ahora no se habían informado de ninguna muerte.
El enterovirus 71 está siendo el principal culpable de los contagios, aunque en algunas provincias, como la sureña Yunnan, también se están produciendo bajas por los enterovirus Coxsackie A16 y Echo.
La mayoría de los niños afectados tiene menos de 5 años y, según se supo ayer, el virus afecta más a varones que a niñas: dos de cada tres contagiados son niños.
Las autoridades chinas, que han puesto en marcha una campaña a nivel nacional, para detectar a los enfermos, han asegurado que el virus no va a suponer una amenaza para los próximos Juegos Olímpicos (en Beijing también ha habido infectados, aunque de momento ninguna muerte), si bien han reconocido que lo peor aún podría estar por llegar, porque el mes de mayor riesgo de contagio será julio.
