Actualizado 21/02/2008 17:46

La extracción ilegal de acuíferos, "asignatura pendiente" de la política del agua en España

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MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, afirmó este jueves que la extracción ilegal de los acuíferos ha sido la "asignatura pendiente" de la política del agua en España. No obstante, aseguró que desde el ministerio "se trabaja para conocer mejor las masas de agua subterránea" y reducir estas extracciones.

En la inauguración de la Jornada "Agua y agricultura" en Madrid Narbona recordó que, en esta comunidad, "había 10.000 pozos ilegales, y hoy se han reducido a 3.000", un ejemplo que le sirvió para destacar el "potente" plan fluvial del Alto Guadiana para "hacer frente de una vez por todas a uno de los mayores problemas de sobrexplotacion de acuíferos".

En este sentido, Narbona resaltó la colaboración de las asociaciones agrarias de Castilla-La Mancha para conseguir este objetivo en un plazo que, según dijo, "siempre será superior" al que les "hubiera gustado". Sin embargo, recalcó que lo harían de una forma "gradual, concertada, transparente, aplicando recursos públicos presupuestarios para que la incidencia de estos procesos en la agricultura no sea negativa".

Asimismo, la ministra insistió en el papel de los agricultores dentro del nuevo Plan Hidrológico de Cuenca para "que se adapte de manera eficiente" a las exigencias de la Unión Europea. "Sabemos que las exigencia de recuperación de costes del agua dentro del conjunto de objetivos de la nueva planificación es, sin duda, el terreno más fácilmente abonado por la demagogia y la falsedad", espetó Narbona.

DEFENSA DEL AGUA DESALINIZADA

Por otro lado, la titular de Medio Ambiente se pronunció contra los contrarios al uso de agua desalinizada en la agricultura. Narbona explicó que un total de 25.000 agricultores de comunidades, entre las que destaca la zona del levante, "han firmado convenios para utilizar agua desalinizada".

Además, como "objetivo", destacó el "interés de reducir el consumo de energía en las plantas desalinizadoras para que ese agua tenga cada vez un coste menor". Para Narbona, "la desalinización del litoral permite suministrar agua para abastecimiento de boca, de las ciudades y reduciendo el uso de acuíferos, cuyo uso está dirigido al consumo humano".