JERUSALÉN, 1 Jul. (Reuters/EP) -
Israel negó hoy las acusaciones vertidas por un periodista palestino, que asegura que fue maltratado y herido por tropas hebreas en la frontera entre Jordania y Cisjordania, cuando se dirigía a su casa en la Franja de Gaza procedente de Reino Unido, donde se le había concedido un premio.
Mohamed Omer, que escribe en el diario propalestino 'Washington Report', explicó que fue cacheado y le dejaron desnudo durante casi cuatro horas en el puente de Allenby, controlado por Israel, cuando iba a cruzar a Cisjordania desde Jordania, de camino a su casa en Gaza el pasado jueves.
Según su testimonio, en el puente de Allenby Bridge fue obligado a quedarse en ropa interior por un oficial israelí que luego se la quitó. Después, otros dos le arrastraron por las piernas delante de otros viajeros. Después de que vomitara y se desmayara, el personal israelí de seguridad en la frontera pidió una ambulancia para que le llevara al hospital en la ciudad de Jericó.
Sin embargo, fuentes de la seguridad de Israel explicaron que el cacheo y el registro de las pertenencias de Omer fue realizado "por las sospechas de que había estado en contacto con elementos hostiles y que le habían pedido que traficara con algo" para introducirlo dentro de los territorios palestinos.
Las fuentes señalaron que Omer recibió un "tratamiento justo y no se tomó ninguna acción irregular contra él" durante el registro. "Al acabar el registro, perdió el equilibrio y se cayó por alguna razón que no conocemos. Se llamó a un grupo de médicos, una ambulancia y un paramédico y fue trasladado para recibir tratamiento a Jericó", añadieron.
Mientras estaba en el hospital de Jericó (Cisjordania), el periodista consiguió contactar con los diplomáticos holandeses que le habían facilitado el viaje a Europa, los cuales le trasladaron a un paso israelí en la frontera con la Franja de Gaza.
De vuelta al territorio controlado por Hamás, Omer ingresó en otro hospital, donde los médicos le indicaron que había sufrido una crisis nerviosa y que varias de sus costillas estaban rotas.
