Actualizado 24/06/2009 16:34

Más del 80 por ciento de los delfines carece de protección

MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

WWF alertó de que más del 80 por ciento de los delfines, a los que consideró como "los grandes olvidados", carece de protección, según los datos de el informe 'Pequeños cetáceos: Las ballenas olvidadas', realizado por esta organización ecologista y hecho público este miércoles.

Así, en el estudio se advierte que "los pequeños cetáceos desaparecen de océanos y ríos, víctimas de la caza desmedida, la contaminación y la pérdida de sus hábitats". Por ello, la organización pide que se le dedique a estas pequeñas especies "la misma atención que a las grandes, antes de que sea demasiado tarde".

En este sentido, remarca que "mientras las grandes ballenas acaparan la atención del mundo, sus hermanas pequeñas se están muriendo a un ritmo insostenible". En total, en el mundo, según los datos que manejan, mueren al año más de 300.000 pequeños cetáceos atrapados accidentalmente en redes de pesca.

"Esta es sólo una de las múltiples causas que les están llevando a la extinción", explica WWF, que también alerta de "la falta de normas de conservación adecuadas están empujando a los pequeños cetáceos --marsopas, delfines y pequeñas ballenas-- hacia una muerte segura".

Por otro lado, "una desventaja significativa" a la que se enfrentan los pequeños cetáceos, en comparación con los grandes, es una falta acuciante de datos sobre su número y hábitos. Así, 40 de las 69 especies de pequeños cetáceos (un 58%) están clasificados por la UICN dentro de la categoría de 'Información insuficiente', lo que significa que no existen suficientes datos científicos como para determinar el grado de amenaza de cada especie.

LAS GRANDES BALLENAS, MÁS PROTEGIDAS

WWF cree que mientras que las grandes ballenas se hallan, "hasta un cierto grado", protegidas por la moratoria de la caza comercial, establecida en 1986, "la captura de pequeños cetáceos continúa imparable alrededor del planeta, sin gestión ni control por parte de la comunidad internacional".

En cambio, casi todas las especies de grandes ballenas disfrutan del mayor nivel de amparo otorgado por CITES --la convención de conservación que regula el comercio internacional de especies salvajes protegidas--, lo que contrasta con el 17% de las especies de delfines y marsopas que lo están. Asimismo, la Convención de Especies Migratorias (CMS) protege el 87% de las especies de grandes ballenas, pero menos de la mitad de las especies de pequeños cetáceos.

Por ejemplo, según indicaron, la caza de 16.000 marsopas de Dall cada año en las aguas costeras de Japón "está considerada insostenible". "Y, aun así, --continúan-- varias de las naciones defensoras de la caza de ballenas presentes en la reunión de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) se niegan a discutir la conservación de los pequeños cetáceos".

"Ya es hora de que los miembros de la CBI asuman la responsabilidad de la conservación futura de todas las ballenas, grandes y pequeñas; el mundo no puede ignorar a las pequeñas ballenas de la Tierra hasta que sea demasiado tarde", comentó la directora del Programa de Especies de WWF Internacional, Susan Lieberman.