DAKAR, 9 May. (Reuters/EP) -
El presidente de Senegal, Abdulaye Wade, ha amenazado con demandar a la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) si no devuelve los gastos de capital descontados de los fondos recaudados para ayudar a África con los altos precios de los alimentos.
En un intento de afrontar el creciente descontento de la población con este aumento del precio de los alimentos, Wade lanzó este ataque a la FAO, denominándola "pozo de dinero sin fondo, dinero gastado para su funcionamiento sin apenas realizar operaciones efectivas sobre el terreno".
El director general de la FAO y compatriota senegalés, Jacques Diouf, que fue ministro en uno de los gobiernos del Partido Socialista, cuyo mandato de 40 años terminó con la victoria del partido de Wade.
En unas declaraciones realizadas por televisión la pasada noche, el presidente afirmó que ha estado en contacto con miembros de la agencia humanitaria para discutir sus diferencias.
"Les dije: 'Si continúais os llevaré a los tribunales. Debéis devolver el 20% del dinero recaudado en nuestro nombre'", dijo Wade en su discurso. "Se quedaron con el 20% del dinero recaudado en nombre de África para dirigirlo a la FAO. Les dije que quienes crearon la FAO deberían pagar sus propios costes", añadió.
Wade también pidió a principios de esta semana que la FAO se incorpore a una de las más recientes agencias de la ONU, el Fondo Internacional para el Desarrollo de la Agricultura, para así crear un organismo mundial de ayuda a la agricultura. Según Wade, esta nueva agencia debería tener su base en el continente africano.
"¿DÓNDE HA IDO EL DINERO?"
El director general de la FAO respondió a Wade que debería asumir la responsabilidad de su país antes de culpar a las agencias humanitarias internacionales. "El papel de la FAO es de asesoramiento, es un papel de apoyo. La organización ofrece expertos técnicos y cada país decide sus propias prioridades. Esto es suficiente para observar que el gasto realizado va a la agricultura del país, comparado con el gasto en otros sectores", declaró Diouf a 'Radio Francia Internacional'.
Diouf añadió que Wade debería considerar todo lo que Senegal se gastó al alojar la cumbre de la Organización de la Conferencia Islámica realizada el pasado marzo, con la que se mejoraron carreteras y comenzaron otros proyectos con una combinación de fondos nacionales y de donantes extranjeros.
"Miren todo el gasto en infraestructuras para la cumbre. Éste es un hecho reciente, pero hay que realizar un análisis objetivo de la estructura de los presupuestos nacionales. ¿Dónde ha ido a parar el dinero? Hay decisiones que ha tomado el Gobierno y que no son responsabilidad de la FAO", añadió Diouf.
Senegal es uno de los países africanos que recibe más ayuda económica extranjera y uno de los mayores importadores de alimentos del mundo. Al igual que otros países africanos, Senegal ha sido testigo de disturbios y conflictos a causa de los altos precios de los alimentos y la gasolina en los últimos meses.
Wade intentó fomentar un renacimiento de la agricultura en el país con pocos resultados por el momento. El mes pasado, anunció la "Gran Ofensiva para la Alimentación y la Abundancia" para incrementar la producción agrícola y hacer al país autosuficiente en alimentos de primera necesidad, especialmente de arroz.