Actualizado 16/01/2012 11:55

HRW afirma que Uganda puede ser un ejemplo para otros países

Corrimiento de tierras en Uganda
Reuters


MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -

La resolución de los conflictos jurídicos y organizativos surgidos a raíz de la primera guerra de Uganda a través de la creación de una división del Tribunal Supremo, la División Internacional de Crímenes (ICD por sus siglas en inglés), que se encarga de juzgar las violaciones del Derecho Internacional, puede servir de ejemplo para otros países, según un informe publicado este lunes por la organización pro Derechos Humanos, Human Rights Watch (HRW).

HRW afirma que las primeras experiencias registradas en Uganda pueden proporcionar información relevante para los países que enjuicien a nivel nacional crímenes de violación del Derecho Internacional, como actos de genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. La ICD en Uganda se encarga también de enjuiciar los delitos de terrorismo.

El informe de HRW, "Justicia para los delitos graves ante los tribunales nacionales: la División Internacional de Crímenes de Uganda", aporta una visión general del principio de complementariedad (según el cual los tribunales nacionales deben ser los principales vehículos para perseguir el genocidio, los crímenes de guerra, y los crímenes de lesa humanidad) en relación con la iniciativa de Uganda.

El informe, se ha desarrollado a través de un proceso de investigación en Uganda que se llevó a cabo en septiembre de 2011, analizando el trabajo de la División hasta la fecha, los obstáculos que ha encontrado y los desafíos a los que tiene que hacer frente en su labor futura.

"Los juicios nacionales por crímenes de guerra deben rendir cuentas por los crímenes cometidos en Uganda", ha explicado una consejera del Programa de Justicia Internacional de la organización, Elise Keppler. "Sin embargo, quedan preguntas pendientes para la División Internacional de Crímenes, si quiere tener éxito a la hora de alcanzar plenamente su objetivo de hacer justicia", ha añadido.

El informe es parte de un trabajo en el que la organización pone en relación está investigación con Bosnia, República Democrática del Congo, Guinea y Kenia.

Actualmente el único caso que lleva la ICD es la presunta participación de Thomas Kwoyelo, un miembro del grupo insurgente Ejército de Resistencia del Señor (LRA), en crímenes de guerra. Según HRW, el resultado de este juicio puede ser decisivo para determinar si los casos de delitos graves cometidos por miembros del LRA durante el conflicto en el norte de Uganda son procedentes.

Este es uno de los desafíos a los que hace referencia HRW ya que la ICD deberá determinar si la Ley de Amnistía de Uganda incluye en última instancia los casos contra miembros del LRA y si la legislación del país permite la aplicación del Estatuto de Roma para perseguir los crímenes del conflicto.

El documento se centra en la importancia de la justicia creíble -- para responsabilizar de los crímenes de guerra cometidos tanto por LRA como por el Ejército-- y en la necesidad de proporcionar un apoyo adecuado y dar el tiempo adecuado a los acusados para preparar su defensa. Además, evalúa el impacto de las deficiencias estructurales en el ICD, como la frecuente rotación del personal dentro y fuera de la División, la falta de una adecuada protección de los testigos y un sistema de apoyo.

"La experiencia de la División Internacional de Crímenes puede ofrecer información a los Estados que se enfrentan a la tarea de enjuiciar los crímenes de guerra ante los tribunales nacionales", ha afirmado Keppler.

El Gobierno de Uganda debe garantizar que los delitos cometidos tanto por el LRA como por el Ejército de Uganda son estudiados y que los obstáculos legales son superados, ha afirmado la organización.

Donantes han aportado fondos para la ICD, incluso para cubrir necesidades tan importantes como la promoción de la protección de testigos y proveer a la División de intérpretes. Sin embargo, otras áreas cruciales - en particular la representación de la defensa - necesitan financiación.

"El Gobierno de Uganda tendrá que proporcionar el apoyo inigualable a la ICD para asegurar un juicio justo, eficaz", ha dicho Keppler. "Los donantes también tienen que desempeñar un papel crítico, no sólo por las necesidades de financiación clave, sino también haciendo hincapié en la importancia de la justicia por delitos cometidos por ambas partes", ha añadido.