Actualizado 25/05/2009 19:17

Las ONG presentes en Mogadiscio (Somalia) unen su trabajo para asistir a los cerca de 60.000 desplazados nuevos

MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -

Las ONG locales presentes en la capital somalí, Mogadiscio, han creado un grupo de trabajo en un intento por movilizar la ayuda urgente necesaria para los miles de civiles desplazados en los últimos días, informa la agencia de noticias humanitarias de la ONU, IRIN.

"La situación es tan mala que si no se hace nada muchos morirán", declaró un activista de la sociedad civil, Asha Sha'ur. "Pedimos a las agencias humanitarias que ayuden a estas personas antes de que sea demasiado tarde", añadió.

El trabajo humanitario en Mogadiscio prácticamente se ha paralizado debido al incremento de la violencia. Se estima que entre 57.000 y 60.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares desde el pasado enfrentamiento que estalló el 8 de mayo, de acuerdo con el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

De acuerdo con el vicepresidente de la Organización Elman para los Derechos Humanos, Ali Sheij Yassin, 207 personas han muerto desde el 8 de mayo, y sólo el 22 de este mes murieron 59 en Mogadiscio, aunque la cifra refleja sólo las muertes que el grupo ha podido verificar.

La violencia ha obligado a la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) a cerrar la clínica que tenía en el distrito de Yaqshid, y la instalación sólo volverá a abrir sus puertas una vez que se dé un mínimo de seguridad.

La semana pasada, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) informó del saqueo de su complejo en la ciudad de Jowhar, situada a unos 90 kilómetros al sur de Mogadiscio, cuando la milicia de Al Shabab se hizo con su control.

Más de 50.000 niños gravemente malnutridos y otros 85.000 malnutridos de forma moderada de las zonas sur y centro de Somalia se han visto afectados por la interrupción en los suministros médicos y nutricionales. El saqueo del 17 de mayo dio lugar a la destrucción de los suministros y recursos humanitarios, así como el equipamiento. "El equipamiento para almacenar vacunas en frío se ha visto afectado, por lo que miles de dosis de vacunas contra el sarampión y la polio, entre otras, han sido destruidas", según UNICEF.

Los nuevos desplazados viven ahora en condiciones desastrosas. "Muchos de ellos carecen de refugio y comparten espacios pequeños con otros y con muy pocos alimentos, si los hay", señala Sha'ur. "Necesitan ayuda de todos los campos, pero el refugio es lo más urgente", añade.