NUEVA YORK, 28 May. (EUROPA PRESS) -
Después de los violentos ataques sobre los trabajadores inmigrantes, los refugiados y los asilados que viven en los asentamientos del país, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), envió suministros de ayuda a los niños y a las mujeres de las ciudades más golpeadas de Johannesburgo, Ejuruleni y Tshwane, según informó hoy la organización mediante un comunicado.
UNICEF suministró productos de higiene para adultos, además de comida, ropa y mantas para las víctimas de la violencia, la mayoría de las cuales huyó de sus hogares con pocas o ninguna posesión. El objetivo de la organización es asegurarse de que los bebés, niños y madres estén adecuadamente vestidos, alimentados de una forma segura y apropiada y que la población mantiene una higiene básica.
Aunque las cifras varían, al menos 17.000 personas se desplazaron sólo en la provincia de Gauteng, entre los que se encuentran un mínimo de 6.000 niños y mujeres. En la provincia occidental del Cabo y en la provincia de KwaZulu-Natal también hay un gran número de gente desplazada.
La organización dice que la necesidad para refugiarse es más aguda por la caída de las temperaturas a 5ºC en Johanesburgo y a 10ºC en la ciudad de Tshwane. Desde muchos de los asentamientos para los desplazados se ha informado de que hay escasez de suministros, por lo que la agencia se ha comprometido a ayudar con un refuerzo de cereales para los niños, continúa el comunicado.
A finales de esta semana, UNICEF también ayudará a las organizaciones presentes en la zona a organizar grupos de trabajo y a establecer en diferentes lugares orfanatos para que los niños afectados por esta violencia puedan sentir alguna estabilidad en medio de la desestabilización actual.
Entre los suplementos entregados por esta organización a la Cruz Roja de Sudáfrica y al Departamento de Inmigración de Johanesburgo hay camisetas de manga larga para los niños, mantas y latas de leche en polvo, entre otros, concluyó el comunicado.
