Actualizado 02/10/2008 16:34

ACNUR elogia la "excelente" actitud hacia los refugiados de un país como Chad en comparación con Europa

Lamenta el "olvido" en que se encuentran los refugiados de la RCA, que han sufrido "exactamente lo mismo" que los de Darfur


MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -

La portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Chad, Annette Rehrl, elogió hoy la "excelente" actitud mostrada hacia los refugiados por un país tan pobre como Chad, cuyo Gobierno "nunca" ha negado sus derechos a los desplazados de la República Centroafricana y de Darfur y cuya población es "muy generosa y comparte lo poco que tiene". Asimismo, lamentó el "olvido" en que se encuentran los refugiados centroafricanos en comparación con los de Darfur, a pesar de que "han sufrido absolutamente lo mismo".

La política de los Gobiernos de los países africanos en favor de los refugiados muestra un "constraste increíble" en comparación con la de los europeos, afirmó Rehrl en rueda de prensa celebrada en la sede de ACNUR en Madrid. El Gobierno de Chad, por ejemplo, "jamás ha dicho que no a un refugiado que quisiera quedarse". "A pesar de tener una situación muy crítica con Sudán, sabe hacer la diferencia entre la gente que viene a refugiarse y el Gobierno sudanés", prosiguió.

"Legalmente, un refugiado debe tener los mismos derechos que un ciudadano del país que le acoge y Chad nunca ha negado esos derechos a nadie", aseguró. Chad alberga en la actualidad a cerca de medio millón de refugiados y desplazados, de los cuales 250.000 proceden de la región sudanesa de Darfur, 56.000 de la República Centroafricana y 180.000 son desplazados internos por el conflicto del sur y este del país.

Según la portavoz, "los chadianos son de por sí muy generosos, por muy poco que tengan siempre lo comparten". Ello es así a pesar de que, paradójicamente, las condiciones de vida de la población de los campos de refugiados de Darfur es bastante mejor que las de la población local circundante, sobre todo en el este de Chad, una región "extremadamente pobre".

"Al margen de que la situación de un refugiado sea siempre un drama, dentro del contexto regional los refugiados de Darfur son los que mejor viven en el este de Chad", explicó. "Tienen asistencia, comida, agua, leña, casas y todos los utensilios que sirven para sobrevivir, acceso a médicos, a escuelas", prosiguió.

Incluso los 180.000 desplazados internos chadianos cuentan con ayuda alimentaria, médicos, asistencia legal y con algunos proyectos de desarrollo, por ejemplo de la UE. Las aldeas de la zona, en cambio, "no tienen agua, ni escuelas ni médicos". Por ello, para evitar tensiones ACNUR incluye a las poblaciones rurales de los alrededores en sus programas de apoyo a los refugiados para que puedan beneficiarse de sus proyectos de ayuda, explicó.

Annette Reherl, nacida hace 45 años en Munich y criada desde muy pequeña en Madrid, razón por la cual habla un perfecto castellano, está licenciada en Literatura y Psicología y ha ejercido de periodista para diversos medios, hasta que se incorporó a ACNUR en 2004. Es autora del libro 'Die Diamantenkinder', editado en Munich en 2004 y dedicado a la situación de los niños soldados de Sierra Leona y Liberia.

"UNA DIGNIDAD INCREÍBLE"

Los refugiados de Darfur, según la portavoz, se reparten en doce campamentos situados en las zonas desérticas del este del país, pero sobreviven cómodamente gracias a las ayudas internacionales y a que son personas acostumbradas a vivir en el desierto y a "no tener nada". "Los refugiados sudaneses tiene muchísimo orgullo, muchísimo amor propio y una dignidad increíble", recordó. "Han pasado por lo peor, pero tienen la cabeza muy alta y no quieren limosnas", añadió. "Lo llevan bastante bien, no se quejan", explicó.

Además, explicó, la población refugiada procedente de Darfur está experimentando un "cambio brusco" en sus pautas de vida que podría acabar "poco a poco" con la sociedad tradicional en favor de las mujeres. "Entre el 80 y el 85 por ciento de los refugiados son mujeres con sus niños" y los hombres están en buena parte "muertos o combatiendo con los rebeldes", indicó.

"Los hombres mismos nos lo cuentan, admiten que no son importantes, que todo el poder para moverse lo tienen las mujeres", señaló. "Habrá qué ver qué ocurrirá cuando vuelvan a sus tierras, pero lo que es seguro es que no van a poder vivir la vida tal como la dejaron atrás", manifestó.

EL OLVIDO DE LOS CENTROAFRICANOS

Los refugiados procedentes de la República Centroafricana son "diferentes", explicó. Son campesinos, acostumbrados a una tierra fértil y sus cinco campamentos de refugiados se encuentran, de hecho, en una zona del sur de Chad mucho más feraz que les permite ser un poco más autosuficientes. "Tienen acceso a tierras, pueden cultivar y traer sus ganados", recordó.

Lo más lamentable, a su juicio, es el "olvido" en que se encuentran los refugiados centroafricanos en comparación con los de Darfur. "Los refugiados de la República Centroafricana han sufrido lo mismo, absolutamente lo mismo, que los de Chad", advirtió. "Las fuerzas de oposición les han bombardeado, les han quemado los pueblos, han matado a sus familias, les han robado ganado", pero mientras que para los refugiados de Chad se han destinado "bastantes fondos", para los de la República Centroafricana no hay "casi nada", denunció.

La crisis de desplazamientos procedentes del norte de este país se produjo sobre todo entre 2006 y 2007 a causa de los ataques contra sus pueblos y a la violencia entre grupos étnicos. El pasado mes de enero, según Annette Rehrl, llegaron 10.000 refugiados procedentes de la República Centroafricana, pero "no le interesó a nadie". En cambio, la llegada de 13.000 refugiados de Darfur un mes más tarde atrajo el interés informativo "de todo el mundo", lamentó. "Darfur está muy de moda, hay muchísimos políticos, artistas, organizaciones que se ocupan de ello", manifestó.

El presupuesto de ACNUR para los refugiados en Chad es de 97,8 millones de dólares. El pasado 31 de agosto sólo se habían obtenido 53 millones procedentes de las contribuciones.

Al respecto, Annette Rehrl advirtió de que la actual crisis mundial causada por la subida de los precios de los alimentos podría perjudicar seriamente a su trabajo. El Programa Mundial de Alimentos (PAM) ya se ha visto obligado a reducir raciones para los desplazados internos de Sudán "y en Chad, si las cosas siguen así, no debemos excluir que en 2009 pase lo mismo", alertó.