Actualizado 28/11/2008 12:52

Las autoridades chinas ejecutan al médico acusado de espiar para Taiwán

PEKÍN, 28 Nov. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -

El médico chino acusado de haber revelado información sobre la salud de importantes dirigentes del país y haber espiado para Taiwán fue ejecutado esta mañana en Pekín, según informó su yerno.

La ejecución habría tenido lugar a pesar de que el Ministerio de Asuntos Exteriores chino había autorizado, a petición de la Embajada austríaca, un segundo encuentro del condenado, Wo Weihan, con su familia para hoy.

"Hemos recibido la noticia de Stephan Scholz, el 'número dos' de la Embajada austríaca, de que el Ministerio de Asuntos Exteriores ha confirmado que Wo Weihan fue ejecutado esta mañana", confirmó su yerno, Michael Rolfus, de nacionalidad austríaca. La familia había recibido rumores no confirmados por la mañana sobre el posible ajusticiamiento del padre.

La organización Amnistía Internacional había exigido públicamente esta semana el indulto para Wo. Sus familiares denunciaban que el procedimiento no había cumplido los mínimos requisitos legales, ya que Wo no contó con un abogado y se retractó de su supuesta confesión, obtenida posiblemente mediante tortura, durante el juicio.

El proceso contra Wo, en realidad, no se ajustaba a los típicos casos emprendidos por la justicia china contra supuestos difusores de los secretos de Estado chinos. Wo no era considerado un activista político y los cargos contra él señalaban que el médico "podría" haber hablado del estado de salud de altos dirigentes chinos y enviado información sobre una revista "clasificada" que, de hecho, era de consulta pública en la Academia China de Ciencias.

Sus familiares afirman desconocer cuál es el motivo real de la condena a su padre, aunque según su hija, residente en Estados Unidos y desplazada esta semana a Pekín tras recibir el aviso de que podía reunirse con su padre (el primer anuncio recibido en estos casi cuatro años, lo que sería un posible indicio de que la ejecución tendrá lugar en los próximos días), la razón podría ser un ajuste de cuentas político.

Las sospechas sobre que la ejecución de Wo podría estar cercana surgieron cuando sus familiares fueron contactados para mantener un encuentro con él después de casi cuatro años incomunicados (el médico fue detenido a principios de 2005).

Según explicó la familia tras el encuentro con Wo, el médico manifestó confiar en el sistema judicial chino y en que haría lo "correcto". Wo no tenía conocimiento sobre su inmediato destino y sus familiares, según reconocieron, no se atrevieron a explicarle que se trataba de su último encuentro.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino ya había declarado ayer que Wo había violado la ley, que el juicio había sido justo y los derechos procesales habían estado garantizados. "Sólo porque Wo Weihan tenga familiares extranjeros no significa que su caso debería ser llevado de forma diferente", afirmó el portavoz, Qin Gang.