Actualizado 06/10/2008 14:47

Corbacho calcula que entre 8.700 y 13.050 inmigrantes en paro se acogerán al retorno voluntario

BARCELONA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, calculó hoy que entre 8.700 y 13.050 inmigrantes en paro se acogerán al decreto de retorno voluntario puesto en marcha por el Gobierno para que este colectivo pueda capitalizar la prestación de desempleo a la que tienen derecho y volver a su país de origen si no tienen "esperanzas de encontrar trabajo en un futuro próximo".

En una entrevista a 'Catalunya Informació' recogida por Europa Press, Corbacho estimó que, de los 87.000 inmigrantes parados procedentes de países con convenios con la Seguridad Social española, "entre un 10 y un 15% se podrían acoger" a la medida.

El ministro aseguró que el decreto tiene vocación de tener "carácter permanente" para apoyar las "migraciones circulares", y no sólo aplicarse durante esta coyuntura económica "difícil". Destacó que la medida ofrece "una oportunidad" de volver a su país a alguien que "no tenía esperanza de futuro" dándole una prestación que le corresponde "por derecho".

Corbacho se mostró partidario de orientar el trabajo en materia de inmigración a conseguir una política "más unitaria" a nivel europeo, puesto que recordó que la decisión interna de un sólo país "no es lo único que vale, porque tiene efectos sobre otros países vecinos".

REFORMAR LA LEY DE EXTRANJERÍA

El titular de Trabajo justificó la necesidad de reformar la actual Ley de Extranjería porque, a pesar de que hay cosas que funcionan, existen algunas "contradicciones", como el hecho de que los hijos reagrupados de familias inmigrantes entre los 16 y los 18 años no lleguen con un permiso de trabajo a pesar de estar "fuera de la edad escolar".

Corbacho lamentó que la "única posibilidad" que les queda a estos jóvenes sea la de "quedarse en la calle mientras sus padres trabajan".

Además, se mostró partidario de ordenar las reagrupamientos familiares, de modo que el núcleo familiar (pareja e hijos) se pueda reagrupar al cabo de un año de estancia en el país, mientras que la de los padres y suegros se haga "una vez han transcurrido cinco años y el inmigrante tenga una situación jurídica permanente".