DALLAS (EEUU), 18 (Reuters/EP)
William Murray fue ejecutado ayer en el estado norteamericano de Texas con inyección letal por violar y asesinar a una anciana de 93 años de edad.
Murray, de 39 años, fue condenado en 1998 por agredir sexualmente, golpear y estrangular a su víctima en la ciudad de Kaufman, en el norte de Texas. "La mujer tenía una venda alrededor de su cuello y dentro de su boca, que estaba empapada de sangre", informó el Departamento de Justicia Criminal de Texas en un sumario del crimen.
En las últimas declaraciones que pronunció el condenado mientras preparaban su ejecución en Hunstville, Murray pidió perdón a la familia de la víctima. "Quiero decirle a la familia que lo siento", espetó. En su última comida, Murray pidió chili, una pizza de queso, una hamburguesa y té dulce.
Con Murray ya son nueve los condenados a muerte en lo que llevamos de año en Texas, estado donde se ha registrado el mayor número de ejecuciones, sobre todo desde que reanudase las ejecuciones en 1982 después de que la Corte Suprema de Estados Unidos levantase la prohibición de esta práctica en 1976. Asimismo, Texas tiene más de once ejecuciones programadas para lo que queda de año y cuatro para 2009.