Francia organizará a finales de septiembre una cumbre europea sobre igualdad de oportunidades

PARIS 10 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció hoy que la presidencia francesa de la Unión Europea que debuta el próximo 1 de julio organizará a finales de septiembre una cumbre sobre la igualdad de oportunidades, que girará principalmente en torno a las dificultades con las que se encuentran las personas minusválidas.

Durante su intervención ante la Conferencia Nacional sobre Discapacidad celebrada en París, el mandatario galo propuso a nivel nacional la creación de un pacto por el empleo para fomentar la contratación de los trabajadores con minusvalías. En concreto, Sarkozy quiere que se cumpla la obligación que tienen las empresas de más de 20 asalariados desde 1987 de contratar a un 6% de personas con discapacidad.

Por eso, avanzó que las 27.000 compañías afectadas por la norma que no se sometan a esta obligación verán aumentar las multas si no hacen al menos un contrato de este tipo en 2009. También reiteró el compromiso de revalorizar en un 25% en cinco años la asignación estatal de 628,10 euros mensuales destinada a los adultos con minusvalías, de la que se benefician las personas que no pueden acceder a un puesto de trabajo o trabajan a tiempo parcial.

El presidente galo se comprometió también a crear 50.000 nuevas plazas para discapacitados severos en establecimientos especializados, para paliar las actuales listas de espera que, según los datos aportados por el propio Sarkozy, afectan a 15.000 niños y 12.000 adultos.

Por otro lado, habló de la necesidad de un "cambio de cultura" para que los minusválidos tengan acceso a la educación, el ocio y a la vida profesional. "Para derribar los muros de la minusvalía hay que permitir a los minusválidos convertirse en ciudadanos activos. Aunque sea indispensable, la prestación del Estado no es lo único que la sociedad les debe", dijo.

SALARIO DECENTE

Las medidas anunciadas por el presidente no parecen sin embargo satisfacer las reivindicaciones de las asociaciones que representan a unos 5 millones de discapacitados en Francia y que se han movilizado activamente en las últimas semanas. El pasado 29 de marzo, miles de discapacitados salieron a la calle en París para exigir un ingreso mínimo "decente" similar al Salario Mínimo Interprofesional para todos aquéllos que no pueden trabajar.

Según los datos aportados por diversos medios franceses, unos 810.000 minusválidos que no pueden trabajar o lo hacen a tiempo parcial perciben la ayuda estatal máxima de 628,10 euros, cuando el umbral de la pobreza se sitúa en los 817 euros mensuales para una persona sola.

Las asociaciones subrayan igualmente que el nivel de paro de las personas con minusvalías es del 20 %, es decir, el doble de la media nacional. A ello hay que añadir que la formación es escasa y que sólo un 19 % cuenta con estudios de bachillerato.