Actualizado 05/12/2008 09:08

El líder senderista Abimael Guzmán demanda a Perú ante la CIDH en busca de un nuevo juicio

LIMA, 5 Dic. (Reuters/EP) -

El encarcelado líder del grupo guerrillero Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, demandó ayer a Perú ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en busca de un nuevo juicio, alegando que no tuvo un proceso en condiciones y que concluyó con una sentencia a cadena perpetua, según informó ayer su abogado, Alfredo Crespo.

Guzmán, detenido en 1992, tuvo un primer proceso en una corte militar que lo condenó ese mismo año a prisión de por vida. El proceso se repitió después y una corte civil ratificó la sentencia a prisión perpetua en 2006. "Solicitamos que se realice un nuevo juicio conforme las normas de debido proceso", dijo Crespo, quien estuvo entre rejas durante 12 años acusado de vínculos con Sendero Luminoso.

Crespo afirmó que la demanda fue presentaba en septiembre a CIDH de la Organización de Estados Americanos (OEA), pero que lo hace público ahora a la espera de que la denuncia pase a manos de la Corte Interamericana. La demanda a la CIDH fue presentada por el cabecilla del grupo terrorista, de 74 años, y otros siete dirigentes presos. "Fueron sentencias que violaron los Derechos Humanos fundamentales y las garantías establecidas en los pactos internacionales", dijo Crespo en una rueda de prensa.

Sendero Luminoso, que fue considerado como uno de los grupos más violentos de Iberoamérica, inició su lucha armada en 1980, pero desapareció como amenaza real contra el Estado con la detención de Guzmán y sus principales dirigentes. Según cifras oficiales, los enfrentamientos entre Sendero Luminoso y las fuerzas de seguridad dejaron un balance de 69.000 muertos y centenares de desaparecidos en más de dos décadas de guerra interna.

Actualmente, unos 300 guerrilleros de Sendero Luminoso se resisten a dejar las armas y en alianza con las bandas del narcotráfico operan en la Selva y Andes de Perú. En los últimos dos meses, la guerrilla ha acabado con la vida de 22 policías y militares.

Crespo, quien dijo que se reúne todas las semanas con Guzmán en la base naval donde cumple su condena, afirmó que el líder de Sendero Luminoso reclama una amnistía general para todos los presos acusados de terrorismo, incluso para los policías y militares acusados de abusos en la guerra interna y para los que aún persisten en la lucha armada.

Sendero Luminoso tuvo al menos 8.000 combatientes en las prisiones hasta finales de la década pasada. Tras nuevos juicios en cortes civiles y la culminación de condenas, los guerrilleros presos suman unos 700 actualmente. "Que se termine con la política de odio, venganza y que se promueva la reincorporación a la vida cotidiana de quienes se levantaron en armas", sentenció el abogado de Guzmán.