Actualizado 14/01/2008 14:56

El número de hectáreas quemadas en 2007, 82.027, es el más bajo de la década

MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

El número de superficie forestal quemada el año pasado es el más bajo de los últimos 10 años, según el balance provisional del Ministerio de Medio Ambiente a 31 de diciembre, al que ha tenido acceso Europa Press. Así, en 2007 ardieron 82.027,68 hectáreas, casi un 40 por ciento menos que las 133.013,60 de media de los últimos 10 años.

Esta cifra supone, además, un descenso de casi la mitad (48 por ciento) respecto a la superficie incendiada en 2006 (155.362,83 hectáreas). Así, el porcentaje de superficie afectadas respecto al conjunto es de un 0,3 por ciento, mientras que la media se sitúa en el 0,5 y en 2006 ascendió hasta el 0,6.

Por el contrario, 2000 y 2005 fueron los peores de los últimos 10 años con casi 190.000 hectáreas calcinadas, mientras que los menos agresivos, además de 2007, fueron 1999 y 2001, con 82.000 y 93.000 hectáreas quemadas, respectivamente.

En lo que se refiere al pasado año, de las 82.027 hectáreas que fueron arrasadas por el fuego, 35.391 hectáreas eran matorral y monte abierto, 33.068 correspondían a superficie arbolada (vegetación leñosa) y 13.567, a pastos y dehesas (vegetación herbácea).

DESCIENDEN TAMBIÉN LOS GRANDES INCENDIOS

También ha disminuido un 90 por ciento el número de grandes incendios (por encima de 500 hectáreas afectadas), que pasa de 58 a 13 (mientras que la media es de 30). Sólo en 1997 se registró una cifra inferior de grandes incendios (7).

En conjunto, se registraron 10.917 siniestros, 10.000 menos que la media de la década y 6.000 menos que el año 2006. De ellos, 7.771 fueron conatos (inferiores a 1 hectárea) y 3.146 se consideraron incendios (superiores o iguales a una hectárea).

Respecto a la distribución geográfica, casi la mitad de los siniestros se produjeron en el noroeste peninsular (Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco y las provincias de León y Zamora); un 18,38 por ciento se registraron en el Mediterráneo; el resto comunidades interiores sufrieron el 31,91 por ciento; y Canarias, sufrió el 1,57 por ciento.

Ahora bien, el 74,51 por ciento de la superficie arbolada en España que se perdió el año pasado corresponde a Canarias; un 12,6 por ciento al Mediterráneo; un 6,9 por ciento al noroeste y un 5,9 por ciento a las comunidades interiores. Finalmente, un 48,69 por ciento de la superficie forestal también se perdió en Canarias; un 19 por ciento, en el noroeste; un 17,71 por ciento, en el Mediterráneo; y un 14,55 por ciento, en las comunidades interiores.