NUEVA YORK 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente libanés, Michel Sleiman, declaró ayer ante la Asamblea General de la ONU que a través del seguimiento de la situación en su país, Naciones Unidas ha contribuido al establecimiento de los "fundamentos, líneas y principios" para enfrentarse a la crisis y a los retos a los que se enfrenta su país desde hace décadas, y pidió a la comunidad internacional a que inste a Israel a que cumpla las resoluciones del Consejo de Seguridad.
Asimismo, expresó su apoyo a la Fuerza Interina de la ONU en Líbano, UNIFIL, y prometió que proporcionará seguridad a las tropas que se enfrentan a "ataques terroristas" en su país. Además, resaltó que "a pesar de las crisis, agresiones y guerras", Líbano "ha mantenido un sistema democrático a través de elecciones periódicas".
Por otra parte, recordó que desde 1948 Líbano ha recibido a cientos de miles de refugiados palestinos, y ha sido objeto de dos agresiones por parte de Israel. Por ello, aseguró que su país seguirá intentando que se cumpla la petición realizada hace tiempo por la Asamblea para que Israel ofrezca una compensación y asuma la responsabilidad por esa situación.
RETIRADA ISRAELÍ
También afirmó que Líbano está comprometido con las resoluciones 425 (adoptada en 1978) y 1701 (de 2006), en las que el Consejo de Seguridad de la ONU pidió la retirada incondicional de las fuerzas israelíes de Líbano. Sleiman comentó que se han realizado esfuerzos con éxito, con la ayuda de la ONU, para liberar a los prisioneros y detenidos libaneses de las cárceles y centros de detención israelíes.
Asimismo, recordó que su país se enfrenta a varios riesgos urgentes como la obtención de los mapas que muestran dónde se lanzaron todas las minas israelíes y bombas sin explotar, la recuperación de territorios ocupados, el terrorismo y el desarrollo de una estrategia nacional de Defensa.
El mandatario se comprometió a apoyar el proceso de paz en Oriente Próximo y con la Iniciativa Árabe de Paz adoptada en la cumbre celebrada en Beirut en 2002. En este sentido, citó el derecho inalienable de la población palestina a establecer un Estado propio, con Jerusalén como su capital, y pidió a la comunidad internacional la financiación necesaria para las agencias de ayuda de la ONU. Aun así, rechazó por completo el reasentamiento de refugiados palestinos en su territorio.
Acerca de África, el presidente expresó la afinidad de Líbano con los países de habla francesa, y prometió su apoyo al documento presentado con motivo de la Reunión de Alto Nivel sobre las Necesidades de Desarrollo de África.