Actualizado 07/11/2016 18:27

La Junta reconoce a las siete víctimas de la talidomida en la provincia de Jaén

Registro de talidomida
EUROPA PRESS/JUNTA

JAÉN 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Andalucía ha reconocido a las siete víctimas de la talidomida en la provincia de Jaén. Lo ha hecho mediante la puesta en marcha de un registro para un mejor seguimiento de la situación de salud de estos pacientes.

El consejero de Salud, Aquilino Alonso, y su homóloga de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, han hecho entrega en Sevilla de los certificados de inscripción en el registro de talidomida de Andalucía, primero de estas características a nivel estatal.

Los jiennenses reconocidos hasta ahora como víctimas de este medicamento son siete (seis hombres y una mujer), entre un total de 51 andaluces en total. Estos reconocimientos se han realizado tras la solicitud de los afectados y según la evaluación clínica realizada por las unidades médicas de la Inspección de Servicios Sanitarios, a partir de un protocolo elaborado con la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía.

Aquilino Alonso ha destacado que esta inscripción permitirá "garantizar un mejor seguimiento individual, según las necesidades y particularidades de cada una de las personas afectadas", a la vez que supone un reconocimiento oficial de cara a posibles acciones ante los tribunales.

El consejero de Salud se ha referido al hecho de que las indemnizaciones exigidas hasta el momento han sido denegadas, debido a que se ha considerado que los hechos han prescrito, pese a lo cual "se puede continuar buscando caminos para hacerlas posibles, como ha ocurrido en otros países y como se ha reconocido en las propias sentencias, estableciendo daños tardíos no prescritos".

Alonso también ha querido agradecer la colaboración e implicación de Avite, la asociación de víctimas de la talidomida en España, con quien "se ha mantenido un diálogo constante y un trabajo conjunto y comprometido, que es la mejor manera de avanzar en la buena dirección, para dar respuestas adecuadas a las necesidades reales".

La titular de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha recalcado la importancia del registro con el que "se hace justicia con un colectivo que ha recibido muchos reveses" en las casi seis décadas que lleva luchando. Ha subrayado el "empeño de la Junta" para lograr que los baremos de discapacidad se ajusten a las necesidades de las personas afectadas.

Sánchez Rubio ha resaltado que "sí hay voluntad es posible avanzar, como ha hecho la comunidad andaluza con la creación de este registro. El Gobierno andaluz les ha ofrecido todo el apoyo y trabajo que sea necesario para que se les reconozcan sus derechos que les corresponden por las gravísimas secuelas que padecen desde su nacimiento".

REGISTRO

La Junta de Andalucía puso en marcha el pasado mes de marzo el registro de personas con anomalías connatales causadas por la talidomida en la comunidad autónoma, con el fin de garantizarles un adecuado seguimiento y mejorar las medidas de atención sanitaria, rehabilitación y prevención.

Este instrumento, adscrito a la Consejería de Salud, permite disponer de información fiable, actualizada y completa para determinar el número y la situación de las víctimas, así como el alcance real del problema.

Esta información permitirá también planificar políticas de salud en relación con las personas con anomalías connatales causadas por talidomida y contar con la información necesaria para orientar la elaboración y evaluación de actividades de prevención, planificación sanitaria y asistencia a las personas inscritas.

La talidomida, medicamento comercializado en los años 50 del pasado siglo XX, se considera responsable de malformaciones en casi 10.000 personas, de las que entre 1.500 y 3.000 se produjeron en España.

Esta sustancia es un principio farmacológico desarrollado por la multinacional Grünenthal en 1953. Por sus propiedades sedantes e hipnóticas se convirtió en una alternativa a los barbitúricos y fue también comercializado para el tratamiento sintomático de las náuseas y los vómitos durante el embarazo. Poco después de su introducción en el mercado se observó un incremento de nacimientos de niños con serias malformaciones, como consecuencia de la exposición del útero materno al fármaco.

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