Publicado 04/12/2020 17:40

El hospital Macarena de Sevilla mejora la eficiencia en la distribución de fármacos mediante botiquines automáticos

Dispensador de fármacos en el Hospital Macarena
Dispensador de fármacos en el Hospital Macarena - HUVM

SEVILLA, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

Desde el Servicio de Farmacia del Hospital Universitario Virgen Macarena se está llevando a cabo, desde hace unos meses, una reorganización del modelo de distribución de medicación a pacientes hospitalizados a través de los botiquines automáticos.

En este sentido, el avance más reciente ha sido la ampliación y modernización de los botiquines de dispensación automática, logrando incrementar de 11 a 13, las unidades que se benefician actualmente del mismo. Se ha realizado una redistribución del trabajo y de los profesionales asignados y se ha logrado que la reposición de estos botiquines pasen de tres veces en semana, a una reposición diaria, incluido los fines de semana, detalla el centro en un comunicado.

Para el Servicio de Farmacia, esto ultimo ha supuesto una serie de ventajas como son el avance obtenido en la detección de falta de medicamentos en tiempo real, y la disminución de los stocks, con el consiguiente ahorro en medicación para las unidades, y una mayor rotación de los fármacos con disminución de riesgo de caducidades.

En la actualidad, se utilizan botiquines de dispensación automática en las unidades de Pacientes críticos y semicríticos, Urgencias, Cuidados Intensivos de adultos y Pediátrico, Unidades de Recuperación Postoperatoria, Coronarias y área de quirófanos.

La principal aplicación de estos botiquines automáticos es la posibilidad de asignar ada medicamento que se extrae del mismo, al paciente al que debe ser administrado. Aunque este sistema dispone de un amplio abanico de propiedades tal y como explica el jefe del Servicio de Farmacia, Miguel Angel Calleja, "estos botiquines nos permiten entre otras cosas, ver los consumos y la rotación de los fármacos, tener un control de caducidades, y un control de estupefacientes administrados con nombre y apellido del paciente, tal y como marca la normativa sanitaria".

Asimismo, a ello se suma "un control de fármacos sensibles y de alto precio y la vigilancia de alergias y alertas medicamentosas". "Todo esto se ha conseguido, añade el doctor Calleja, gracias al trabajo en equipo así como al empoderamiento de un técnico específico en la gestión los botiquines".

En esta misma línea de innovación por parte del Servicio de Farmacia Hospitalaria, Calleja recuerda que en los dos últimos años, el Servicio de Farmacia Hospitalaria "apostó con firmeza" también por el modelo de dispensación individualizada de medicación en unidosis. Un dispositivo que debido a su alta eficacia, dice, ya se utiliza en 28 alas de hospitalización, comprendidas entre los hospitales Virgen Macarena y San Lázaro.