SEVILLA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Andalucía, a través del sistema sanitario público, junto al Plan Andaluz sobre Drogas y Adicciones (Pasda) y la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (Faisem), abrirá "próximamente" en Utrera (Sevilla) "una unidad de atención integral para patología dual UAI PD".
Así lo detalla el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, en un informe, consultado por Europa Press, de control de cumplimiento de una moción relativa a política general en materia de salud mental de la población andaluza que defendió el pasado mes de septiembre el Grupo Socialista en el Pleno del Parlamento.
Con dicha moción, entre otras cuestiones, el Parlamento acordó instar al Gobierno andaluz a "abrir de nuevo y reforzar los dispositivos de atención y tratamiento de adicciones con impacto en salud mental, haciendo un estudio pormenorizado de su distribución en el territorio andaluz y evaluando las necesidades de medios profesionales requeridos, e ir aumentado el nivel de ocupación de las Unidades de Desintoxicación Hospitalaria (UDH) en función de la evolución de la pandemia, así como a poner en marcha una Unidad de Atención Integral para Patología Dual con una intervención sobre el usuario de carácter residencial, asistencial, social, laboral y ocupacional".
Al respecto de esta última cuestión, el consejero Aguirre ha avanzado en su informe que "desde el Sistema Sanitario Público de Andalucía, junto al Plan Andaluz sobre Drogas y Adicciones (Pasda) y la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (Faisem), "se va a abrir próximamente una unidad de atención integral para patología dual UAI PD".
Se trata de una "unidad pionera en España", que se ubicará en Utrera, según detalla el consejero, quien aclara además que, "al ser integral, la intervención sobre el usuario será además de carácter residencial y asistencial, de carácter social, laboral, ocupacional, etcétera".
Desde la Consejería aclaran que, con esta unidad, "no se trata de abarcar el 1% de patologías o casos hipercomplejos --punta de la pirámide de complejidad de nuestros usuarios atendidos--, sino aquellos casos complejos que puedan aprovechar este recurso", que se situarían en un "segundo escalón de la pirámide de complejidad", y que representarían "aproximadamente" al "9% de los usuarios" atendidos.
Se tratará además de un "recurso sociosanitario de estancia abierta; por tanto, de carácter voluntario", y para su entrada se contempla una entrevista a la persona usuaria y la familia, según abunda el titular andaluz de Salud, quien especifica además que, para ingresar en este centro, "deben concurrir" tanto una "motivación" como "intencionalidad de la deshabituación" y "compromiso".
Asimismo, el acceso a este recurso "se denegará en caso de alteración conductual grave; agresividad o conducta antisocial, incapacidad para realizar funciones vitales básicas, no aceptación del contrato terapéutico, patologías orgánicas concretas --cardiopatía, diabetes descompensada, entre otras--", en caso de no haber "habilidades de afrontamiento".
El informe del consejero también aclara que no es un centro "de primera elección", por lo que el usuario del mismo "debe haber pasado previamente por un centro de alguna de las dos redes asistenciales".
El consejero de Salud, que defiende que la estrategia de la administración andaluza "debe incluir tratamientos sociales además de los clínicos", explica igualmente que "desde el principio debe haber un programa de recuperación", cuya duración "dependerá del foco y la evolución".
"A priori, la estancia será de un máximo de nueve meses; seis de forma estándar prorrogable durante tres meses previa valoración de la Comisión", según aclara Aguirre, quien también apunta que "no procede el reingreso", así como que "el periodo de entrada se considerará un periodo de prueba para ver si hay una adaptación positiva".
"La salida será parte del proceso terapéutico", y el usuario "nunca pasará" a una Unidad de Hospitalización de Salud Mental (UHSM) "de forma directa", además de que "serán motivos de exclusión en cualquier momento la falta de adaptación o el consumo de drogas".
SELECCIÓN DE USUARIOS
Las posibles candidaturas se plantearán en las "comisiones de casos complejos" --o comisiones mixtas de patología dual--, y "si el usuario cumple con los requisitos y la Comisión de Casos complejos lo aprueba", esa solicitud se enviará al Programa de Salud Mental (PSM), según indica el consejero, quien aclara que "se creará para tal efecto un correo electrónico específico y una aplicación informática que controle y registre todas las candidaturas y estancias", así como que será la Comisión Técnica "la encargada de valorar la prioridad de las candidaturas en función de la complejidad de las mismas".
Desde la Consejería de Salud y Familias apuestan por evaluar su labor en relación a este proyecto "novedoso" con indicadores "cualitativos" además de con "los indicadores cuantitativos típicos de atención prestada", según señala también el informe firmado por Jesús Aguirre a comienzos de este mes de febrero, que concluye sosteniendo que "la desintoxicación hospitalaria debe entenderse como un primer paso en el tratamiento de la dependencia, debiendo establecerse los necesarios canales de coordinación con los programas de tratamiento ambulatorio".
