BILBAO 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
El área de Desarrollo Sostenible y Medio Natural del Ayuntamiento de Barakaldo volverá a poner en marcha durante el curso 2025-2026 una nueva edición del proyecto "Ciencia ciudadana sobre calidad del aire y salud infantil", una iniciativa que combina aprendizaje, investigación y sensibilización ambiental en los centros educativos del municipio y que está impulsado por el colectivo ecologista Sagarrak-Ekologistak Martxan.
La concejala delegada del Área de Desarrollo Sostenible y Medio Natural, Alba Delgado, ha explicado que "la campaña, que pretende acercar la ciencia ciudadana a las escuelas y concienciar sobre la movilidad urbana, se repite tras los buenos resultados del curso anterior y se desarrollará en cuatro nuevos centros escolares: CEIP Rontegi y los IES Beurko, IES Minas y Antonio Trueba".
La propuesta, que ha sido presentada en el IES Beurko, está dirigida al alumnado del tercer ciclo de primaria y la ESO, invita a los niños y niñas a convertirse en pequeños científicos, midiendo los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) en su entorno escolar y elaborando un mapa de calidad del aire de Barakaldo.
A través de esta experiencia práctica, el alumnado aprenderá sobre contaminación, movilidad sostenible y salud, desarrollando además habilidades de análisis y pensamiento crítico. "Queremos que los más pequeños comprendan cómo su forma de desplazarse o los hábitos de su entorno afectan al aire que respiramos", ha explicado Alba Delgado, para añadir que "es una manera de educar en ciencia y sostenibilidad desde la experiencia directa".
El programa se desarrollará entre octubre y febrero, en distintas fases: sesiones de formación para el profesorado, talleres con el alumnado, colocación de tubos medidores, análisis de las muestras y presentación pública de los resultados.
La metodología está alineada con el currículo competencial, fomentando un aprendizaje profundo y significativo basado en una situación real y cercana. En esta segunda edición participarán cuatro centros educativos pertenecientes a dos nuevos barrios de la ciudad, con la instalación de 60 tubos de medición. Los resultados se compartirán con toda la comunidad escolar y vecinal, favoreciendo la reflexión colectiva sobre cómo mejorar la calidad del aire en el municipio.
Alba Delgado ha recordado que "la experiencia del curso anterior se valoró de forma muy positiva, tanto por los datos obtenidos como por el entusiasmo de los centros y los alumnos y alumnas". Asimismo, considera que este tipo de proyectos "son fundamentales para avanzar hacia una movilidad más saludable, segura y sostenible, y para preparar a la población ante la próxima implantación de la Zona de Bajas Emisiones en 2026".