Ampuero reconoce que los empresarios deben "dar ejemplo" aplicándose los preceptos de la flexibilidad que propugnan para los trabajadores
BILBAO, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Círculo de Empresarios Vascos, José Domingo Ampuero, ensalzó hoy la actitud ante la crisis de los sindicatos de otros países, entre los que citó a Alemania, donde las centrales tienen una postura "favorable a la dirección de la empresa" para intentar "salvar empleos", llegando incluso a "reducir salarios".
Además, en la presentación del último número del Boletín de Estudios Económicos de la Asociación de Licenciados Universidad Comercial de Deusto, la organizaciçon empresarial vasca reconoció que los propios empresarios deben comenzar a "dar ejemplo", aplicándose a sus contratos y sueldos los preceptos de la flexibilidad que propugnan para los trabajadores.
Respecto a la actitud de los sindicatos alemanes, insistió en que éstos piensan: "cómo salvo a la empresa y cómo mi empresa va a ser rentable para yo quedarme allí toda la vida".
De esta forma, explicó la actuación de las centrales germanas, o las de países como México o Brasil, "no es ajena a los beneficios de la empresa", ya que "quieren saber cuánto se gana". "Es decir, te sorprendes, porque los de aquí son mucho más duros, mucho más exigentes y no entendemos bien esta actitud", añadió.
El responsable del Círculo de Empresarios lamentó que "hemos perdido unos años estupendos" de crecimiento para abrir "una negociacion más serena" aunque, "si no hemos hecho los deberes en el momento en que tendríamos que haberlos hecho, pues no quedará más remedio que hacerlo" ahora, intentando "el consenso".
Según Ampuero, la crisis "ha demostrado las enormes carencias de nuestro mercado de trabajo que explica, no sólo la destrucción de empleo sino, también, el enorme diferencial que en esta materia mantenemos con los países de nuestro entorno".
Asimismo, defendió que "la movilidad geográfica y funcional, la productividad, la cualificación y la especialización, la rigidez del marco contractual y las políticas activas de empleo siguen siendo nuestras principales asignaturas pendientes".
TRES PUNTOS DE REFORMA
Conforme a este planteamiento, el presidente del Círculo de Empresarios pidió una reforma de la tipología y características de los contratos laborales, las políticas activas de empleo y el sistema de negociación colectiva.
En lo que respecta al marco contractual, abogó por reducir la tipología de contratos con "el objetivo de incrementar la flexibilidad contractual y la seguridad de los trabajadores" porque "el elevado número de contratos existentes" produce una "segmentación" e incrementa los costes de administración de las empresas o "dificulta la movilidad funcional" de los trabajadores.
"El que haya tal cantidad de contratos supone que haya una diferencia enorme entre unos trabajadores y otros. El que tiene un contrato temporal, vamos a llamarle entre comillas basura que le llaman ahora, que le puedes poner en la calle en cinco minutos. Y, en cambio, el trabajador que lleva 20 años instalado en la empresa, aunque esa empresa tenga que hacer una rescisión de empleo, el trabajador tiene una serie de seguridades, unos gastos de despido que le hacen prácticamente inamovible", comparó.
A su juicio, sobre estas "diferencias" de situación laboral debería tratar la negociación social entre sindicatos, empresarios y gobierno para "disminuirlas, suavizarlas o flexibilizarlas".
Sobre los costes de extinción de los contratos, pidió que se busquen fórmulas para compatibilizar, por un lado, la seguridad de las empresas "ante contingencias sobrevenidas" y, por otro, "la correspondiente compensación económica que dé seguridad a los trabajadores", es decir, el concepto global de "flexiseguridad".
Ampuero también mostró su deseo de que aumente la movilidad funcional y disminuya el absentismo de las plantillas, "flexibilizando el proceso de modificación de las características de los contratos".
Asimismo, insistió en que "la movilidad funcional y el tema del absentismo son dos cosas que se pueden atacar muy rápidamente" si existe "buena voluntad" porque no afectan a la estructura del mercado de trabajo.
"En cuanto a la negociación colectiva, sería deseable la integración y la universalidad, es decir, una mayor representación de las partes negociadoras de los colectivos que ahora se ven desplazados de la negociación, como es el caso de los desempleados, de los trabajadores temporales y las pymes", añadió.
El dirigente del Círculo de Empresarios también apostó por "fortalecer" los niveles superiores de negociación y adaptar los convenios "a las necesidades de las empresas", para que éstas puedan "hacer frente a sus condiciones particulares en aquellos aspectos que las hacen más competitivas".
De la misma forma, pidió que se suprima "la indización automática, que dificulta la adaptación de los salarios reales a la situación económica".
SINDICATOS Y EMPRESARIOS
Ampuero ensalzó la actitud ante la crisis de los sindicatos de otros países, entre los que citó a Alemania, donde las centrales tienen una postura "favorable a la dirección de la empresa" para intentar "salvar empleos" llegando incluso a "reducir salarios".
"La mentalidad del sindicato es cómo salvo a la empresa y cómo mi empresa va a ser rentable para yo quedarme allí toda la vida. Y no es ajena a los beneficios de la empresa, quiere saber cuánto se gana, es decir, te sorprendes, porque los de aquí son mucho más duros, mucho más exigentes y no entendemos bien esta actitud", añadió.
Sin embargo también reconoció que los propios empresarios deben comenzar a "dar ejemplo" aplicándose a sus contratos y sueldos los preceptos de la flexibilidad que propugnan para los trabajadores
Respecto a las políticas activas de empleo, indicó que sería aconsejable "redistribuir el gasto", favoreciendo la inversión en colocaciones e intermediación laboral, con una "coordinación efectiva" y mayor "competencia en la intermediación".
FUTURO
A su entender, mientras no se adopte todo este conjunto de medidas, la economía española "sufrirá las consecuencias en los ciclos recesivos, destruyendo empleo de una manera mucho más intensa que otras economías".
"La actual crisis obliga a todos los agentes sociales, partidos políticos, gobernantes, a realizar un esfuerzo de consenso en la búsqueda de una mayor efectividad y eficacia en materia de relaciones laborales", agregó.
Ampuero remarcó que las relaciones laborales deben "reformularse" teniendo en cuenta "la flexibilidad impuesta por la globalización y el nuevo desarrollo tecnológico".
Igualmente, destacó que el mercado de trabajo estatal "ha arrastrado, hasta este momento, un grave problema estructural" que se comprueba con el diferencial del paro con respecto a otros países de su entorno "incluso en los mejores momentos del ciclo expansivo".
Pese a reconocer que sería preferible que las reformas que propone se hubieran realizado durante el citado ciclo expansivo, remarcó que "se trata de una asignatura siempre pendiente" que "lastra nuestro crecimiento y nuestra capacidad competitiva".
PUBLICACIÓN
En la presentación de la publicación del Boletín de Estudios Económicos también intervino la decana de la Universidad Comercial de Deusto, Susana Rodríguez, y el presidente de la Asociación de Licenciados de la misma universidad, José María Bergareche.
Este número presentado hoy ha contado con la colaboración, tanto económica como en los textos publicados, del Círculo de Empresarios Vascos, que ya tuvo una colaboración anterior en 2007.
