Los trabajos han salido a licitación por 1,1 millones de euros y tienen un plazo de ejecución de 10 meses
SAN SEBASTIÁN, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
La carretera N-I, en su paso por la localidad guipuzcoana de Beasain, contará con un nuevo lineal de pantallas acústicas en sentido Vitoria, entre la salida del túnel de Beasain y el ramal de salida del enlace de Lazkao. El proyecto también contempla la sustitución de las biondas metálicas de este tramo por barreras de hormigón, para reforzar así la seguridad de toda la zona.
La diputada foral de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, acompañada de la alcaldesa de Beasain, Leire Artola, ha presentado estas obras, que han salido a licitación por un importe de 1.160.380 euros (IVA incluido) y tienen un plazo de ejecución de 10 meses. La nueva estructura cubrirá una longitud total de 330 metros con pantallas fonoabsorbentes de una altura de 3,50 metros.
Se trata de una de las actuaciones recogidas en el Plan de Acción frente al Ruido de las Carreteras de la Diputación Foral de Gipuzkoa y, según ha explicado la diputada, la zona de actuación en el caso de Beasain es de "especial afección porque al ruido generado por el tráfico rodado se suma el provocado por el paso de los trenes".
Oiarbide ha señalado que "ese tipo de actuaciones son prioritarias para el departamento porque tienen una incidencia directa en la vida de miles de guipuzcoanos", como es el caso de Beasain, donde las pantallas acústicas "protegerán todo un entorno especialmente sensible y su instalación beneficiará a cerca de 4.000 beasaindarras".
Por su parte, la alcaldesa ha subrayado la importancia de poder mitigar con esta obra los problemas de ruido provocados por el tráfico de la N-I y el tren. "La mejora en la calidad de vida de los vecinos de Zaldizurreta, en este caso, ha sido el objetivo prioritario", ha destacado Artola.
En cuanto a los aspectos técnicos de la obra, Oiarbide ha explicado que los trabajos tendrán que hacer frente a una serie de condicionantes especiales, dadas las características del entorno, y ha recordado que la N-I, a su paso por Beasain, "es una de las principales vías de comunicación y transporte del territorio, con una intensidad de media diaria de tráfico entre 30.000 y 35.000 vehículos". Las obras evitarán, "en la medida de lo posible", cortar el carril en la calzada sentido Vitoria.
"MÁS SEGURIDAD"
La diputada foral ha afirmado que el segundo de los condicionantes relevantes, por otra parte, son las limitaciones que se establecen a los trabajos en el entorno de las vías de ferrocarril de Adif, y se deberán coordinar ambas limitaciones en un tramo central de la obra.
Así, ha apuntado que las obras tendrán como resultado "una notable mejora, no solo en la reducción del impacto acústico de la carretera y las vías del tren. También se reforzará la seguridad de todo el entorno en caso de accidentes de tráfico".
De esta manera, con el fin de asegurar la contención de los vehículos y evitar el impacto de estos sobre las pantallas acústicas y la consiguiente invasión de las vías de ferrocarril, se prevé sustituir las biondas metálicas actuales por barreras de hormigón prefabricadas de alta contención y anchura de trabajo reducida.
Con el nuevo lineal de Beasain, se da un paso más en el cumplimiento de la hoja de ruta establecida por el Plan de Acción frente al Ruido de Gipuzkoa y se sumará a las ya colocadas a lo largo de los últimos meses en diferentes puntos de Elgoibar y Tolosa, y a las que se instalarán o se están instalando en Errenteria, Zarautz y Andoain.
La extensión del plan prevé una inversión de unos 20 millones de euros en varios municipios de Gipuzkoa, se ha diseñado teniendo en cuenta las carreteras de la red foral que soportan más de 3 millones de vehículos al año e incluye, entre otras, las carreteras N-I, AP-8 y la GI-20 a su paso por Beasain, Tolosa, Zarautz o Errenteria.
