El gasto en innovación en Euskadi llegó en 2018 a 2.828 millones y el 17,3% de las compañías fueron innovadoras

El gasto total en actividades innovadoras ascendió a 2.828 millones de euros en 2018, el 17,3% de las empresas vascas fueron innovadoras y el 25,7% de estas compañías recibieron financiación pública por parte del Gobierno vasco y de diputaciones y ayuntamientos, así como del Estado o de la Unión Europea, según datos elaborados por el Instituto Vasco de Estadística, Eustat, en su Encuesta de Innovación.

En el caso de las compañías de 10 o más empleados, la cifra ascendió al 30,1% y por tipología de innovación, la relacionada con el Producto la realizan el 18,1% de las empresas de Euskadi, mientras que la innovación de Proceso corresponde al 27,9% de las compañías.

A nivel estatal, el porcentaje de empresas innovadoras de 10 o más empleados se sitúa en el 20%, algo más de 10 puntos porcentuales menos que en la Comunidad Autónoma Vasca, según ha indicado el Instituto Vasco de Estadística.

Si se tiene en cuenta el total de las empresas, sin tomar en cuenta su número de empleados, el porcentaje de empresas innovadoras en Euskadi en 2018 fue del 17,3%. De ellas, el 8,5% se dedicaron a innovación de Producto y el 16,4% a innovación de Proceso.

El gasto efectuado por las empresas vascas en actividades innovadoras ascendió a 2.828 millones de euros en 2018. En esas actividades, el gasto en I+D interna representa el 50,3%, la Adquisición de I+D (I+D externa) llega al 16,1% y Otras actividades innovadoras, supone el 33,6% restante.

FINANCIACIÓN PÚBLICA

Las empresas innovadoras pueden recibir ayudas por financiación pública de una o más instituciones y en 2018 recibieron estas ayudas públicas el 25,7% de estas compañías. Tomando en cuenta su origen, destacan, según el Eustat, las subvenciones provenientes del Gobierno Vasco, que alcanzan al 17,6% del total de empresas innovadoras. Por su parte, las diputaciones forales y las administraciones locales financian al 9,1% y al 4,3%, respectivamente, de estas empresas.

Junto a ello, la Administración del Estado contribuye al 4,4% de las empresas innovadoras vascas, mientras que el 5,3% de las empresas recibe financiación de la Unión Europea a través del programa Horizonte 2020 y un porcentaje similar a través de otra financiación.

En el caso de las de 10 o más empleados, el 48,1% reciben ayudas públicas y es también el Gobierno Vasco el que financia a un mayor número, concretamente al 36%, de las compañías con gastos en innovación de este tamaño. Las diputaciones forales y las administraciones locales financian al 18,9% y al 7,9%, respectivamente, mientras que la financiación de la Administración del Estado alcanza al 15,4% de las empresas de 10 y más trabajadores. Por su parte, el 10,7% recibe financiación de la Unión Europea a través del programa Horizonte 2020 y el 8,9% a través de otro tipo de financiación

DIFICULTAD PARA INNOVAR

Asimismo, algo más de la mitad de las empresas, concretamente el 53,4%, consideran que existen factores que "dificultan" la realización de actividades innovadoras. Entre ellos se alude a que "existen otras prioridades dentro de su empresa", caso del 38,5% de las compañías preguntadas; a los "costes demasiado elevados", el 32,6%; a que existe "demasiada competencia en el mercado", respuesta ofrecida por el 27,3%; "dificultades para obtener ayudas o subvenciones públicas" para el 25,5%; o "falta de financiación dentro de la empresa", en el 24,9% de los casos; entre otros.

En las empresas de 10 o más empleados, las que creen que existen factores que dificultan la realización de actividades innovadoras elevan este porcentaje hasta el 61,7%, aunque destacan los mismos impedimentos anteriores.

En las empresas con innovación de producto, el 36,4% del total de su cifra de negocios proviene de sus productos innovadores, mientras que los productos sin alterar o ligeramente modificados representan el 63,6% restante.

De nuevo si se disgregan las compañías de 10 o más empleados, estos porcentajes varían ligeramente y suponen, en este caso, un 35,5% la repercusión media que tienen los productos nuevos o sensiblemente mejorados sobre la cifra de negocios.