BILBAO, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
La consejera vasca de Educación, Cristina Uriarte, ha anunciado esta tarde que este próximo martes el Departamento que dirige pedirá un aumento de los servicios mínimos que fijará la Consejería de Trabajo para la huelga del personal de los centros concertados de Iniciativa Social, con el fin de establecer unas condiciones para dar una "atención mínima" al alumnado de necesidades educativas especiales y también de otros centros.
Uriarte se ha reunido en Bilbao con representantes de las federaciones de asociaciones de madres y padres del alumnado de los centros concertados de iniciativa social, afectadas por las ocho jornadas de huelga convocadas por la totalidad de los sindicatos representados en el sector, desde este miércoles, 16 de enero, y hasta el día 25. La convocatoria afecta a alrededor de 120.000 alumnos de más de 200 centros de enseñanza y están llamados a secundarla en torno a 9.000 trabajadores.
Tras el encuentro, la responsable vasca de Educación ha dicho compartir su preocupación con los padres y madres de alumnos, y ha calificado de "exceso" los ocho días de huelga convocados, por lo que ha pedido una "reflexión" a los sindicatos, porque, según ha advertido, "no podemos permitir que nuestros alumnos pierdan el curso".
En este sentido, ha apelado a la patronal y a los sindicatos para que saquen el conflicto de las aulas, porque "no pueden ser perjudicados los alumnos", que se sienten a negociar y que actúen con responsabilidad "porque estamos en una situación muy seria".
Por su parte, la portavoz de las de federaciones y asociaciones de madres y padres de alumnos, Miriam González, ha pedido a la consejera que les ayude a que se retire el conflicto laboral de las aulas, dado que con estos paros "se pierde casi un 10% del curso lectivo y no sabemos el final de todo esto".
Diferentes asociaciones de padres y madres de alumnos han convocado diversas movilizaciones en Bilbao para denunciar los efectos de este conflicto. La primera el 18 de enero, una concentración de seis a siete de la tarde en la plaza Indautxu, y una manifestación el 20 de enero a las doce del mediodía, que partirá del Sagrado Corazón. Las federaciones de padres y madres deberán deliberar si se suman a esas convocatorias.
