Juicio.- Familiares y cargos políticos arropan al lehendakari, López y el resto de acusados en el primer día de la vista

Actualizado: jueves, 8 enero 2009 18:37

BILBAO, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -

Familiares y cargos políticos arroparon hoy al lehendakari, Juan José Ibarretxe, a los dirigentes socialistas Patxi López y Rodolfo Ares, así como a los cinco miembros de la izquierda abertzale, que hoy se sentaron en el banquillo de los acusados en la primera sesión del juicio celebrado en el TSJPV por las reuniones que mantuvieron estando Batasuna ilegalizada.

Simpatizantes del PNV y de la izquierda abertzale se concentraron a las puertas del Palacio de Justicia de Bilbao para expresar su rechazo a la celebración del juicio y apoyar a Ibarretxe, por una parte, y, por otra, a los representantes de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi, Pernando Barrena, Rufi Etxeberria, Juan José Petrikorena y Olatz Dañobeitia.

El respaldo a los socialistas se limitó a los familiares de López y Ares, así como una pequeña representación de cargos, encabezados por los secretarios generales provinciales.

Juan José Ibarretxe fue el primero de los ocho encausados en llegar al tribunal, sobre las nueve de la mañana, tras salir de la sede del PNV de Sabin Etxea, ubicada a escasos metros del Palacio de Justicia, flanqueado por el presidente del EBB, Iñigo Urkullu, y el ex lehendakari José Antonio Ardanza y respaldado por la totalidad de la Ejecutiva de la formación.

Ibarretxe, al que acompañaban también su esposa, Begoña Arregi, y su hija mayor, Eneritz, entró en la sede judicial entre el aplauso del númeroso público congregado en las inmediaciones para mostrarle su respaldo, después de recibir palabras de apoyo de cargos del PNV y de los consejeros del Gobierno vasco, entre ellos Joseba Azkarraga, Javier Madrazo, Gabriel Inclán, Ana Agirre, Esther Larrañaga, Gonzalo Sáez de Samaniego o Tontxu Campos.

También acudieron a expresar su respaldo la presidenta del Parlamento vasco, Izaskun Bilbao, y su antecesor en el cargo, Juan María Atutxa, visiblemente emocionado, así como la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Madariaga, y el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao.

Sobre las nueve y cuarto se produjo la llegada de los dirigentes socialistas Patxi López y Rodolfo Ares, en compañía de sus esposas y junto a una decena de cargos del partido, entre ellos José Antonio Pastor, Txarli Prieto, Melchor Gil, Dimas Sañudo, Mikel Torres o Txema Oleaga.

Su llegada a la sede judicial se desarrolló en silencio y ninguno de ellos se detuvo antes de cruzar el umbral del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

Arnaldo Otegi llegó hasta la sede del alto Tribunal vasco minutos antes de iniciarse el juicio acompañado de su abogada, Jone Gorizelaia. Ante la entrada, cientos de personas, entre las que se encontraban Tasio Erkizia, Ainhoa Etxaide, Rafa Díez, Arantza Urkaregi o Nekane Erauskin, corearon gritos de 'Euskal Herria Aurrera'.

El lehendakari también fue el primero en ocupar su asiento en la sala, a la derecha del tribunal, sobre las nueve y media. Junto a él, y, tras estrecharse las manos, se colocaron, más tarde, López y Ares.

Otegi fue el segundo en entrar a la sala de juicios. Al pasar junto al banquillo, en el que estaba sentado Ibarretxe, ambos se saludaron con un apretón de manos e intercambiaron unas palabras en tono cordial.

Los otros cuatro acusados de la izquierda abertzale que cumplen prisión en diversos centros penitenciarios, fueron conducidos al Palacio de Justicia desde las cárceles de Nanclares y Basauri, a las que fueron trasladados, previamente, con motivo de la celebración del juicio.

Los cuatro se estrecharon en fuertes abrazos con Otegi al entrar en la sala, ovacionados por los simpatizantes de la izquierda abertzale que se encontraban entre el público. Los cinco ocuparon, acto seguido, el segundo de los banquillos de los acusados, situado frente al Tribunal.

Al interior de la sala, accedieron también para presenciar la sesión, el histórico dirigente de HB Tasio Erkizia, el ex secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, la actual líder del sindicato, Ainhoa Etxaide, o el ex preso de ETA Eugenio Etxebeste, 'Antxon', entre otros.

Tras la finalización de la sesión, el lehendakari abandonó el Palacio de Justicia de Bilbao entre aplausos de los concentrados en Jardines de Albia, que coreaban el lema 'Lehendakari aurrera'. Le esperaba el líder jeltzale, Iñigo Urkullu, con el que se fundió en un abrazo, así como otros dirigentes del PNV y cargos institucionales a los que el lehendakari también saludó y dirigió unas palabras.

También se pudieron escuchar gritos a favor de Arnaldo Otegi, cuando éste salió por la puerta principal de la sede judicial y realizaba declaraciones a los medios de comunicación.

Por su parte, los socialistas rechazaron realizar declaraciones también a la salida del Palacio de Justicia. El líder del PSE-EE, Patxi López, demostró que no había perdido el buen humor, cuando uno de sus compañeros de partido le dijo que parecía haber perdido peso. "Pero si estoy como un pincel", aseguró.