Las Juntas de Gipuzkoa piden a los Gobiernos central y vasco que participen en la verificación del alto el fuego de ETA

juntas de Gipuzkoa
EP
Actualizado: miércoles, 12 enero 2011 14:58

Creen que la paz que demanda la sociedad vasca "requiere el cese unilateral, completo, definitivo y verificable de la violencia"

SAN SEBASTIAN, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las Juntas Generales de Gipuzkoa han aprobado una enmienda transaccionada por Hamaikabat, PNV, Aralar y EB-Berdeak, en la que ratifican que la paz que demanda la sociedad vasca "requiere el cese unilateral, completo, definitivo y verificable" de la violencia por parte de ETA, e instan a los Gobiernos central, vasco y navarro a que participen en el proceso de verificación del alto el fuego.

En el texto, las Juntas guipuzcoanas ratifican que la paz que demanda la sociedad vasca "requiere el cese unilateral, completo, definitivo y verificable de la violencia en todas sus expresiones" por parte de ETA, "sin ningún tipo de contraprestación y condicionamiento político".

Asimismo, solicitan a los Gobiernos central, vasco y navarro que participen en el proceso de verificación del "efectivo cumplimiento de las circunstancias citadas", y piden que creen una "amplia red de observadores civiles y de las diferentes instituciones vascas, con la ayuda de expertos internacionales".

La Cámara foral considera que el último comunicado de ETA constituye "un avance", si se inscribe en el proceso de abandono de la violencia y final de la organización antes citado.

Finalmente, "respetando, en todo momento, el principio irrenunciable de que las cuestiones políticas deben resolverse únicamente a través de los representantes legítimos de la voluntad popular", las Juntas reivindican "el papel de la política en el impulso de escenarios dirigidos a conseguir la convivencia entre los vascos, la plena libertad y la normalización social y política de Euskadi, en el que se apueste por vías exclusivamente políticas y estén representadas todas las expresiones políticas de la voluntad popular vasca.

La resolución, que ha sido votada por puntos a petición del PP en aras de lograr un "mínimo consenso" en este tema, ha contado con el voto a favor de todos los grupos en su primer punto, a excepción de Alternatiba que se ha abstenido en todo el contenido del texto. Los populares han rechazado el resto de puntos, mientras que el PSE ha votado en contra en el último apartado.

SOCIEDAD VASCA

En su intervención, el portavoz de H1!, Joxan Rekondo, grupo que ha realizado la proposición inicial, ha considerado que la sociedad vasca es la que puede verificar el fin de la violencia y que a otros observadores corresponderá "auxiliar, ayudar o favorecer". "Hemos sido testigos del crimen y tenemos que testimoniar su fin. Delegar la misión de autentificar el fin de ETA en otros significa renunciar a la certeza de que el final del terrorismo se materializa de verdad", ha subrayado.

Por su parte, la portavoz del PNV, Maribel Vaquero, ha señalado que "el conflicto político entre el Estado y Euskadi es anterior a ETA, y no terminará con la desaparición" de la banda armada. Ha opinado que este conflicto se basa en el reconocimiento de los derechos del pueblo vasco, al tiempo que ha subrayado que "la paz y la normalización requieren la legalización de la izquierda abertzale, para que el juego político democrático no tenga ninguna traba".

La juntera del PSE-EE, Lore Suárez, ha reivindicado el papel de la política "en el impulso de escenarios dirigidos a conseguir la convivencia entre los vascos, la plena libertad, y la normalización social y política de Euskadi" y se ha mostrado convencida de que "sólo ETA tiene en su mano, con su desaparición definitiva e incondicional que este país pueda construir una convivencia en paz y libertad".

El portavoz del PP, Juan Carlos Cano, ha considerado que es necesario "mantener la esperanza" pero ha insistido en que "estamos obligados a alimentarla con los instrumentos del Estado de derecho y la lucha antiterrorista". A su juicio, el último comunicado es "peor moral y políticamente que las anteriores proclamaciones de tregua o alto el fuego" y está "alejado de las exigencias de la ciudadanía" porque "su reclamación de contrapartidas políticas es indignante y patética".

"PASO ADELANTE"

Para el portavoz de EB, Mikel Izagirre, el comunicado de ETA supone "un paso adelante" aunque "no satisface la expectativas creadas". Por ello, ha instado a la organización terrorista a que "dé nuevos pasos que permitan constatar que este alto el fuego evidencia su voluntad inequívoca de abandono definitivo de la violencia". "No es legítimo, política ni éticamente, condicionar el cese de la violencia a la consecución de objetivos políticos", ha añadido.

Por su parte, la portavoz de Aralar, Rebeka Ubera, ha apostado por trabajar para que "el camino que se ha iniciado no tenga vuelta atrás" y ha abogado por el Acuerdo de Gernika como "la hoja de ruta para la paz y la normalización política". "La consecución de la paz nos exige actuar con sinceridad y con generosidad: con flexibilidad para llegar a acuerdos y con firmeza en los principios", ha afirmado.

El representante de Alternatiba Ander Rodríguez ha insistido en que es necesaria la "colaboración de todos" en este asunto y se ha mostrado que cuestiones como la legalización de la izquierda abertzale o el acercamiento de presos "no son contrapartidas políticas, sino medidas para asentar un proceso democrático".