Las lluvias suspenden cinco procesiones de la Semana Santa bilbaína, entre ellas la del Santo Entierro

EUROPA PRESS

BILBAO 31 Mar. (EUROPA PRESS) -

Las lluvias han obligado a suspender un total de cinco procesiones de la Semana Santa bilbaína, entre ellas, la tarde del Viernes Santo, cuando sale la Procesión del Santo Entierro, que, con sus más de 1.000 cofrades y sus 14 pasos procesionales, es la procesión más importante de Bilbao.

Según ha informado la Hermandad de Cofradías Penitenciales de Bilbao, la suspensión fue "especialmente desafortunada" para la Hermandad Penitencial de Nuestra Señora de Begoña, que ese día iba a estrenar el paso de misterio del Santo Cristo de la Humildad.

En cuanto a la Procesión de la Santa Cena, en la tarde del Jueves Santo, la lluvia llegó cuanto cuando la cola de la procesión, en la que va la Presidencia con las representaciones de las nueve cofradías bilbaínas, estaba llegando a la Plaza Circular.

Estas dos procesiones, llamadas generales, que organiza la Cofradía de la Santa Vera Cruz son, precisamente, aquellas en las que desfila todo el patrimonio de pasos de la Semana Santa Bilbaína, relatando entre los dos días toda la historia de la Pasión y Muerte de Jesús.

Además de las dos procesiones generales, hubieron de ser suspendidas tres más: la Procesión de la Caridad, el Domingo de Ramos por la tarde, organizada por la Hermandad de Begoña; la Procesión del Nazareno, el Lunes Santo, que organiza la Cofradía del Nazareno; y la Procesión de la Piedad, el Martes Santo, que organiza la Cofradía de la Merced.

Finalmente, pudieron celebrarse sin lluvia la Procesión del Silencio, el Santo Via Crucis, la Procesión del Encuentro, así como la Procesión de la Esperanza el Sábado Santo por la tarde y la Procesión de la Luz y la Resurrección el Domingo de Resurrección, tras la Misa Pontifical en la Catedral.

Según los informes de las cofradías organizadoras, se advirtió un claro aumento de público en las procesiones no amenazadas por la lluvia, particularmente la Procesión de la Amargura, el Sábado de Pasión; la del Borriquito, el Domingo de Ramos por la mañana; y la Procesión de la Esperanza, el Sábado de Gloria.

El récord absoluto de este año lo alcanzó la Procesión del Borriquito del Domingo de Ramos, con un nivel de público que no se había visto en los últimos 35 años, con una Gran Vía de cuatro personas en fondo hasta la misma Plaza Moyúa.

AUMENTO DE COFRADES

La Hermandad ha destacado el aumento del número de niños y jóvenes que integran las cofradías bilbaínas y participan en las procesiones, de tal forma que, si bien en general se ha producido un aumento de la participación de cofrades, "lo verdaderamente llamativo es que ello se ha debido precisamente a ese aumento de cofrades jóvenes y niños".

Aunque tradicionalmente las cofradías dirigen su acción social hacia el exterior (Cáritas, hospitales, etc.), la crisis está incidiendo de tal forma entre los propios cofrades, que las cofradías ha debido redirigir sus obras de caridad hacia el interior de las cofradías, no sólo para paliar el paro, sino para ayudar a realizar pagos imprevistos en casos de falta de liquidez.

Al final de la Misa de Pontifical del Domingo de Resurrección en la Catedral de Bilbao, el obispo de Bilbao, Mario Iceta, ha felicitado expresamente a las cofradías bilbaínas a través de la Hermandad de Cofradías por la labor que realizan con su catequesis viviente por las calles, prestando así un servicio a "creyentes y no creyentes", al acercarles "lo más profundo de la fe cristiana".

Posteriormente y justo antes de salir la procesión, se ha dirigido a los cofrades y al público que abarrotaba la Plazuela de Santiago para saludar la salida de la Procesión de la Luz y la Resurrección, que cierra las procesiones de Bilbao.