Recuerdan que sus demandas "siguen pendientes" y anuncian movilizaciones el 13 de noviembre en el conjunto del Estado
BILBAO, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria (MPEH) se ha movilizado este lunes en contra del Acuerdo sobre Pensiones firmado por la Mesa de Diálogo Social para exigir su retirada y anunciar nuevas movilizaciones porque la mayor parte de sus reivindicaciones "siguen pendientes" y en el acuerdo "hay mucho espacio opaco y poca claridad".
El colectivo ha llevado a cabo sendas manifestaciones al mediodía en Bilbao y Pamplona, que han concluido ante las delegaciones del Gobierno central en ambas capitales, mientras en San Sebastián han ofrecido una rueda de prensa a las 11.00 horas en el Bulevar, donde se ha leído el comunicado conjunto emitido y al que también se ha dado lectura al inicio de las marchas.
En Bilbao, la manifestación ha partido a las doce desde las escaleras del Ayuntamiento, donde se concentran todos los lunes, y, tras pasar por delante de Sabin Etxea y del Palacio foral, ha finalizado frente a la Delegación del Gobierno, en la Plaza Moyúa.
Antes del inicio se ha dado lectura al comunicado del MPEH, donde han analizado lo que consideran "los contenidos más agresivos" de un acuerdo para la reforma de las pensiones donde, en su opinión, "hay mucho espacio opaco y poca claridad".
Durante la marcha, que ha transcurrido distribuida en tres hileras a lo largo de la calzada, los manifestantes han portado pancartas por unas pensiones dignas y contra la reforma laboral de 2011, además de corear lemas como "Gobierne quien gobierne las pensiones se defienden", "Fuera ladrones de las instituciones", "Derogación, reforma laboral" o "Pensionistas y currantes, todos militantes".
En el comunicado consensuado, el colectivo sostiene que el acuerdo alcanzado para la reforma de la jubilación "ratifica los recortes de las pensiones que introdujo la reforma de 2011, perpertúa las pensiones mínimas de miseria y solo cambian de nombre el factor de sostenibilidad pero mantienen su esencia, ya que ni siquiera lo definen ni hay una renuncia a eliminar ese factor que solo está dirigido a recortar pensiones".
Por otro lado, añaden, ese acuerdo "deja la puerta abierta a la privatización del sistema público y a nuevos recortes y, en definitiva, no garantiza unas pensiones publicas, dignas y justas, lo que nos confirma que la mayor parte de nuestras reivindicaciones siguen pendientes".
PARCHES
A su juicio, las medidas acordadas en la Mesa de Diálogo Social son "puros parches para intentar reducir el costo de las pensiones porque, en lugar de mirar por la sustitución de las personas que se pueden jubilar con 65 o menos años con los centenares de miles de jóvenes cualificados en situación de paro total o en la precariedad, o de impulsar empleos y salarios dignos que permitan engrosar y sostener una caja de seguridad solvente, este gobierno y los sindicatos que apoyan este acuerdo muestran una miopía y actitud absolutamente lamentable".
En su opinión, "el precio que se está pagando por esa losa de la reforma de 2011 es tremendo y su no derogación no sólo hace que se mantengan aquellos recortes y retrocesos, sino que está abriendo la puerta a nuevas medidas y ataques al sistema de pensiones, que se piensan seguir acordando en siguientes fases de negociación de la Mesa y cuyos efectos serán demoledores para las inmediatas y futuras generaciones de jubilados y jubiladas.
Antes del inicio de la manifestación celebrada en la capital vizcaína, el representante del colectivo Jon Fano ha afirmado ante los medios que, como movimiento, son "absolutamente críticos" con este acuerdo sobre pensiones porque "lo único que recoge y legaliza, relacionado con nuestras demandas, es ligar la subida de las pensiones al IPC anual".
Además, ha recordado que, en los elementos que más les preocupan, destaca el hecho de que "no hay absolutamente ningún avance para mejorar las pensiones mínimas ni una aproximación mínima para equipararlas al salario mínimo interprofesional" lo que, desde su perspectiva, hace que, para ellos, "cobre mayor necesidad seguir movilizándose porque no hay solución a medio plazo".
MÁS MANIFESTACIONES
De esta forma, Fano ha adelantado que, de cara a las movilizaciones de los lunes, se concentrarán el próximo lunes 19 de julio y, a partir de esa fecha, irán viendo la evolución de asistencia para decidir si se mantienen durante el mes agosto donde, en todo caso, han confirmado que llevarán a cabo con total seguridad la manifestación que celebran todos los años coincidiendo con la Semana Grande de Bilbao.
Asimismo, el representante de MPEH ha confirmado que tienen aprobado un plan de trabajo a partir de septiembre que incluirá, entre otras actuaciones, una manifestación por el Día Internacional de las Personas Mayores el 1 de octubre y otra movilización "importante, acordada ya con Plataformas del resto del Estado, para realizar una movilización conjunta a nivel del Estado el 13 de noviembre, también en diversas capitales españolas.
HUELGA GENERAL
En ese sentido, y preguntado por si como movimiento de pensionistas apoyarían una huelga general, tal y como ha pedido la secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, o salir a la calle y unir fuerzas para reclamar la derogación de las reformas laborales y sociales, como ha planteado ELA, Fano ha asegurado que, "sin ninguna duda la apoyaremos, ya que, por nuestra parte, ya les hemos emplazado a que se unan a la movilización prevista el 13 de noviembre para que en ella tengan una presencia visible".
El representante del movimiento de pensionistas ha añadido que, por su parte, "tienen constancia de que va a ser necesario ir a una movilización muy potente" aunque, a día de hoy, ha añadido, "no pueden comprometer una opinión como movimiento ya que ésta deberá ser ratificada en asamblea".
Sin embargo, desde su punto de vista, del mismo modo que para la movilización a nivel estatal del 13-N van a llamar a participar a colectivos sindicales y sociales, como feministas, familiares de residentes o comerciantes, "obviamente, nuestra perspectiva actual es que todos deberíamos avanzar hacia una posibilidad de huelga general, no solo laboral, sino también social, porque están en juego los derechos laborales pero también las pensiones".
Finalmente ha puntualizado que esa huelga general "se hace imprescindible, otra cosa es que sea inevitable, pero nuestra intención es avanzar en esa dirección".
