Instan a "plantar cara" y convertirse en "un muro de contención ante esta ola de ataques directos contra el bienestar y el futuro"
BILBAO, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
Sindicatos nacionalistas vascos, gallegos y catalanes, han animado a la ciudadanía de sus respectivas comunidades autónomas a secundar "activamente" la huelga general del próximo 29 de marzo, contra la reforma laboral. En un manifiesto conjunto, rubricado desde su "convicción internacionalista", las centrales han instado a "plantar cara" y convertirse en "un muro de contención ante esta ola de ataques directos contra el bienestar y el futuro de las clases populares".
En una declaración conjunta, ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, EHNE, HIRU, CIG, CUT, Intersindical-CSC e Intersindical Canaria han denunciado los "ataques a los intereses de las clases populares por parte de los sucesivos gobiernos de Madrid y autonómicos".
En su opinión, esa ofensiva desreguladora "coincide con la sustitución del capitalismo productivo por el capitalismo especulativo, de carácter financiero, responsable de la crisis global de dimensiones impensables".
A su juicio, en este marco, "la reforma de las pensiones, los recortes de derechos sociales y laborales", coinciden en el tiempo "con una desregulación del ámbito laboral, en forma de reforma, que remata la destrucción del ámbito público, todo bajo el dogma neoliberal imperante".
Por esta causa, las organizaciones que suscriben el texto, imbricadas en sus "respectivos países y con sus clases populares" han advertido de que no desean "permanecer como espectadores de este desmantelamiento de todo aquello que hace referencia al ámbito público y a la protección social, piezas esenciales de la cohesión y de la justicia social".
"Plantemos cara y convirtámonos en un muro de contención ante esta ola de ataques directos contra el bienestar y el futuro de les clases populares", ha animado.
"OPOSICIÓN FRONTAL"
Los sindicatos firmantes del manifiesto han mostrado su oposición "frontal" a "una reforma laboral que deja en total indefensión a los trabajadores, en un mercado laboral desregulado y a merced, exclusivamente, de los caprichos y necesidades empresariales, donde los convenios colectivos se convierten en papel mojado y en el que las relaciones laborales, lejos de avanzar en derechos, se acercan peligrosamente a las arcaicas relaciones feudales".
"Nos oponemos a una reforma que sólo facilita la expulsión del mercado laboral en lugar de facilitar el acceso al trabajo de las ciudadanas y los ciudadanos y que, por tanto, se convertirá en una nueva herramienta de precarización y de incremento de la desocupación", han advertido.
Por esta causa, han llamado a dar "una respuesta clara e inequívoca" de "oposición" a la reforma con "una huelga general que deje claro que los ciudadanos no aceptarán este ataque directo contra los derechos sociales".
"Una movilización que tiene que ser la respuesta también contra los ataques que sufrimos como pueblos y como clase, para avanzar así en la consecución de marcos de relaciones laborales y protección social propios y hacia la liberación nacional y social de nuestros países", han concluido.
