El artista argentino Iván Marino expone seis instalaciones audiovisuales en el MEIAC de Badajoz

Actualizado: domingo, 23 agosto 2009 18:16

BADAJOZ, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (MEIAC), centro dependiente de la Consejería de Cultura y Turismo, acoge hasta el próximo 30 de agosto una exposición monográfica del artista argentino Iván Marino.

Esta muestra, titulada 'Tampoco', está comisariada por Claudia Giannetti, presenta seis instalaciones audiovisuales computerizadas de la serie Los desastres, realizadas con el apoyo del MEIAC entre 2006 y 2007, así como una selección de sus trabajos videográficos más destacados producidos en los últimos quince años.

Las obras invitan al espectador a ahondar en los meandros de las realidades humanas y, más específicamente, en la insólita y muchas veces inverosímil relación de las personas con la violencia.

El concepto de realidad establece un nexo entre las instalaciones recientes y sus producciones videográficas. En la realización de las instalaciones, la serie de grabados Los desastres de la guerra (1810-1820) de Goya ha sido una fuente de inspiración importante, una obra en la que el pintor partió de acontecimientos concretos para llegar a analizar la propia condición humana.

En las instalaciones audiovisuales computerizadas tituladas 'Sangue' (2006), 'Lingua' (2006), 'El garrote' (2007) y 'Horca' (2007), Iván Marino también parte de imágenes de hechos reales transmitidos por los medios de comunicación tanto oficiales como no oficiales de escenas de bombardeos, torturas o ahorcamiento.

Estos fragmentos videográficos pasan a formar parte de las bases de datos que articulan los sistemas generativos computerizados de las obras. Marino se acoge a la estrategia de Goya de aislar un acontecimiento, transformarlo en una imagen de gran impacto visual que presenta unos hechos, aunque, al contrario de Goya, la representación nunca asume formas estéticamente explícitas.

En los trabajos de la serie Los desastres el orden de las secuencias audiovisuales no es lineal, sino que se visualiza siempre de forma distinta en función del comportamiento aleatorio implementado por el autor.

En sus primeros documentales experimentales y obras de videocreación, el artista, detrás de la cámara, se sitúa como un observador de la realidad del entorno o de las personas que explora.

Como en los vídeos 'Un día Bravo' (1987-1999), 'Siesta' (1997) o 'Cinco retratos de una mujer sentada' (2007), la narración deja entrever cierta voluntad de neutralidad, distanciamiento respecto al sujeto observado. En sus obras más recientes de instalación, advertimos una transición decisiva en su posicionamiento conceptual. Si antes la realidad observada se restringía a las poéticas y las vidas individuales o privadas, ahora el enfoque se dirige a las grandes cuestiones mundiales y humanas.

Cultura Extremadura ofrecido por
Cultura Extremadura