Calle anuncia que estará "completamente remodelado" en 2011, tras la finalización de las obras que costarán más de 3,3 millones de euros
MÉRIDA, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Mérida, Ángel Calle, reabrió hoy las "oxidadas" puertas del Teatro Cine María Luisa en un "emotivo" gesto que marca el inicio de la "recuperación" de esta "importante seña de identidad de la ciudad", en cuyo interior darán comienzo hoy las catas arqueológicas del inmueble.
Rodeado por representantes de los colectivos ciudadanos que desde "hace varios años" reivindican la rehabilitación de este "símbolo" emeritense, el primer edil de la capital extremeña subrayó que con la reapertura de estas puertas, "mucho más que abrir un teatro", lo que se "intenta es aprobar una asignatura pendiente que tenía esta ciudad".
Tras agradecer a todos aquellos vecinos que "cada año", por la conmemoración del Día Internacional del Teatro, se reunían en el exterior del María Luisa para reclamar el comienzo de las obras, Ángel Calle anunció que este edificio estará "obligatoriamente abierto" en el año 2011.
Calle corroboró que, "a pesar de la crisis", el consistorio "meterá todas las prisas" que sean necesarias para que la fecha prevista para la reapertura se cumpla, y este lugar "vuelva a ser lo que fue", un espacio "de encuentro para la gente".
"COMPLETAMENTE REMODELADO" EN 2011
Según detalló, el proyecto para la remodelación del María Luisa ya está sobre la mesa del Ministerio de la Vivienda, que financiará "la mayor parte" de los 3,3 millones de euros que costará la rehabilitación del edificio.
En concreto, dicho ministerio aportará 2 millones "y pico" de euros, a los que se sumarán los 800.000 que cubrirá el ayuntamiento, y los 500.000 euros que sufragará la Junta de Extremadura, y que irán destinados a las catas arqueológicas que inician hoy.
En el año 2011, aseguró, los emeritenses se encontrarán con un cine "completamente remodelado y coqueto", una "especie" de teatro de la ópera pequeño, de unas 600 ó 700 butacas, con un estilo "muy propio", y sobre todo, "abierto".
Así, recalcó, la ciudad "no va a perder" un espacio de "gran valor simbólico". "Ya hemos perdido bastantes señas de identidad; hoy es un día emotivo y que va a marcar un antes y un después en este edificio, pues merece la pena que la ciudad no lo pierda", concluyó.
